ENTREVISTA A VICTORIA CRISTÓBAL, DIRECTORA DE LA AGENCIA MADRILEÑA PARA LA EMIGRACIÓN Y RESPONSABLE EN EL PP DE MADRID

“En la Agencia tenemos un dominio total de lo que hacemos y lo hacemos con convencimiento”

Victoria Cristóbal fue nombrada a primeros de año directora de la recién creada Agencia Madrileña para la Emigración, en el gobierno de Esperanza Aguirre, con quien también ha llevado la emigración al Comité Ejecutivo del PP de Madrid en el que, en su XIV Congreso, celebrado del 18 al 20 de septiembre, fue nombrada responsable de este área en el órgano de dirección.
“En la Agencia tenemos un dominio total de lo que hacemos y lo hacemos con convencimiento”
 La directora de la Agencia Madrileña de Emigración anuncia que viajará a Francia antes de fin de año.
La directora de la Agencia Madrileña de Emigración anuncia que viajará a Francia antes de fin de año.

Victoria Cristóbal fue nombrada a primeros de año directora de la recién creada Agencia Madrileña para la Emigración, en el gobierno de Esperanza Aguirre, con quien también ha llevado la emigración al Comité Ejecutivo del PP de Madrid en el que, en su XIV Congreso, celebrado del 18 al 20 de septiembre, fue nombrada responsable de este área en el órgano de dirección. Desde que asumió estas responsabilidades con los madrileños en el exterior ha participado en todos los foros de emigración en los que están representados y ha viajado para conocerles y diseñar políticas.

 

Pregunta. ¿Cuánta gente compone la Agencia Madrileña para la Emigración?
Respuesta. De momento somos tres. Yo estoy como directora, Manuel Ortiz como asesor y tenemos una secretaria. Echamos a andar el 14 de febrero de este año y ya entonces la presidenta, que veía que iba a haber crisis, me dijo que no quería que hinchásemos esto de gente. Los que estamos tenemos mucha implicación en esto y mucho apoyo por parte de la Consejería General Técnica y de la Consejería de la que dependemos y de todo el personal jurídico y administrativo pero ‘de facto’ somos únicamente tres personas. El año que viene vamos a integrar a tres más, para labores administrativas.
Estamos echando a andar y crear algo nuevo en la Administración cuando no hay nada, cuesta. Pero aunque nos está costando tenemos un dominio total de todo lo que se hace y lo hacemos con mucho convencimiento y procurando no dar ningún paso en falso. Prefiero prometer y cumplir a hacer un gran despliegue y que quede sólo en promesas que creo que es lo que la gente denuncia. Nosotros hemos prometido de momento poco pero lo que hemos prometido prácticamente todo lo hemos cumplido o lo estamos cumpliendo.
P. ¿Cuál es la referencia para desarrollar ese trabajo?
R. Nuestro plan director es un plan de emigración bianual que la ley de creación de la Agencia estipula que tenemos que elaborar; es la columna vertebral que articulará todas nuestras medidas políticas. Ese plan está prácticamente perfilado, lo presentaremos en breve y convocaremos el primer Consejo de Administración de la Agencia, al que irá para su aprobación. De momento nuestra medida estrella fue, antes de crear la Agencia, la apertura en Argentina de la Casa de Madrid, que hará en febrero dos años que está abierta y creo que con un resultado bastante aceptable y que está sirviendo de referencia de lo que queremos hacer, probablemente no de manera tan ambiciosa porque no es la vocación de esta Agencia ir abriendo casas regionales por el mundo, simplemente pensábamos que Buenos Aires es un sitio especial, porque además éramos la única comunidad que no tenía ningún tipo de oficina y era un demanda que cuando llegamos a la Comunidad de Madrid el equipo de Esperanza Aguirre ya detectamos, había peticiones anteriores demandando ayuda e implicación de la Administración para poner en funcionamiento esta Casa de Madrid.
En Argentina el resultado de la Casa en Buenos Aires es francamente bueno, se mueve bien, tiene muchas actividades y un número considerable de socios, se ha dado a conocer entre otras colectividades y casas regionales, con las que colabora, lo que me parece importante porque muchos madrileños en el exterior estaban involucrados en otras casas. Además esta Casa en Buenos Aires ha sido un revulsivo dentro de nuestra colectividad en Argentina y ya tenemos Casa de Madrid en Bahía Blanca, que no cuentan con colaboración nuestra hasta este momento pero que está constituida y tiene su equipo directivo que ha conseguido participar en actos más grandes en la Casa de Madrid en Buenos Aires; también tenemos Centro Madrileño en Rosario, que llevaba años latente y no tenía su situación legalizada, estuve vistándoles en octubre del año pasado; y en Mar del Plata también me dicen que hay gente que quiere constituir un centro.
P. ¿Tiene presupuesto para atenderles y apoyarles?
R. De momento nuestra ayuda ha ido únicamente a la Casa de Madrid en Buenos Aires porque era un poco nuestro buque insignia. De cara al año que viene vamos a abrir un registro de asociaciones, que es otro de los requisitos que pusimos en la Agencia. Ya está tramitado, sólo falta el informe de la Agencia de Protección de Datos que nos autorice a empezar a registrar a estas asociaciones, y este registro nos va a ayudar a dar subvenciones a las casas regionales, no sólo de Argentina sino de cualquier parte del mundo. Es nuestra voluntad colaborar en un intercambio cultural, formativo para la gente joven, queremos impulsar la colaboración y el apoyo a los estudios de posgrado y el tema cultural, de viajes y de intercambio que es una manera de mantener las raíces, sobre todo para la segunda y tercera generación.
P. ¿Viajes de reencuentros con la tierra del tipo que se desarrollan en otras comunidades?
R. Sí. Antes de fin de año vamos a tener a los dos primeros grupos, de manera experimental; proceden de Argentina porque es donde más gente hay y donde más fácil me resulta experimentar, pero si sale bien se hará con todas nuestras casas en el exterior.
Hemos hecho dos planes, por una parte ‘Madrid-reencuentros’ que es para la gente mayor, madrileños que llevan mucho tiempo sin volver a Madrid, quieren volver y nosotros queremos mostrarle un Madrid que probablemente muchos no han conocido, una ciudad moderna y muy cosmopolita, y por otra parte el ‘Plan descubre’, para los jóvenes que no han nacido aquí pero tienen nacionalidad española, son madrileños y no han tenido oportunidad de conocer Madrid.
Para finales de noviembre tendremos aquí al primer grupo. Presentaremos las bases y serán la Casa de Madrid y Turismo Madrid los que nos ayuden a hacer la selección. Serán viajes de 10 días en los que se tratará de dar una visión a todos los niveles de Madrid y su Comunidad, no se queda sólo en la capital sino que se hace alguna excursión.
P. El conocimiento de su ámbito de trabajo también implica desplazamientos para contactar con los madrileños que residen en el extranjero. ¿Cuáles con sus prioridades en este caso?
R. No he viajado demasiado pero sí he tratado de viajar con orden. En este año que no llevamos todavía de Agencia a Argentina he ido con frecuencia; tuve en mayo la oportunidad de ir a Cuba, donde tenemos una asociación, un Comité Gestor de madrileños, que preside Mari Rico, que se había puesto en contacto con nosotros en varias ocasiones, porque tienen una situación bastante precaria y además no tienen legalizada su situación porque no es fácil en Cuba crear asociaciones. Me pidieron que tratase de entrevistarme con alguna autoridad para intentar de legalizar la situación porque nosotros, por supuesto, para dar cualquier tipo de ayuda económica necesitamos que en el país de residencia estén legalizados. Me entrevisté con el vicepresidente del Parlamento cubano, que en principio no está por la labor, pero luego tuvimos encuentros con gente de la embajada y del consulado y estamos intentando encontrar alguna vía de colaboración con ellos. En Cuba encontré una sensibilidad tremenda para todo lo relacionado con la cultura; intentaremos hacer algo allí en este ámbito, de momento les ayudamos como podemos. Tienen un grupo de zarzuela y les vamos a suministrar unos trajes de madrileñas, para que sientan un estímulo más; sé que son cosas menores pero por algo se tiene que empezar.
En el mes de julio estuve en Chile. Ya había tenido contacto con la Asociación de Madrileños de Chile, que preside Elías Botija, que llevaba bastantes años funcionando pero sin los papeles en regla y ahora parece que le han dado un nuevo impulso. Quedé muy satisfecha de ese viaje a Santiago; tuve oportunidad de conocer el Hogar Español, que me dejó gratamente sorprendida, hicimos un encuentro con la colectividad, firmamos un primer protocolo para establecer una colaboración y tuvimos una fiesta muy agradable en el Deportivo Español, club que me causó la mejor de las impresiones posibles. Vamos creando vínculos.
Tenía claro desde el primer momento que quería que éste fuese un trabajo muy de cuerpo a cuerpo, porque no tenemos un estudio de la emigración madrileña que nos diga qué es y qué demanda. La presidenta quería también que fuese un trabajo muy de campo, de conocer, de dar la cara, de hacer viajes largos en los que se tuviese contacto con los madrileños, con las instituciones de la colectividad y las administraciones españolas que nos diesen un poco la pauta de qué políticas son las idóneas para cada sitio.
P. ¿Ya tienen desarrollados programas concretos de actuaciones?
R. Tenemos programas generales que es lo que va a englobar este primer plan bienal de la emigración que va muy enfocado, como decía, al ámbito cultural, a través de exposiciones y viajes, y a la formación a través de becas de posgrado para estudiar aquí.
P. ¿Tienen alguna previsión para la atención sanitaria, que suele ser muy demandada en Iberoamérica?
R. El tema sanitario hay que verlo país a país. Antes de crear la Agencia, la primera medida que la Comunidad de Madrid llevó a cabo para sus emigrantes fue el envío por parte de la presidenta a todos los madrileños en el exterior del documento ‘Salud Madrid Exterior’, que es una tarjeta homologada a la tarjeta sanitaria de la Comunidad de Madrid que les da derecho al uso de la sanidad pública cuando vengan a Madrid, porque nuestras competencias de sanidad pública están en Madrid. Esta tarjeta ha tenido muy buena acogida; se han convalidado más de 3.000 de gente de fuera que ha venido aquí o que ha subsanado errores.
Tenemos un convenio sanitario con el Hospital Español que probablemente vamos a cambiar el año que viene porque en Argentina la sanidad es muy demandada, sobre todo por los mayores, y para entonces es posible que podamos ofrecer una póliza de seguro sanitario para los madrileños que estén en situación precaria y lo requieran, para poder darles asistencia sanitaria en el Hospital Español, que creo que tiene bastantes carencias y podemos ayudarle a que puedan reformar las instalaciones y cambiar aparatos.
La Asociación de Madrileños en Chile nos decía que tenían mucho interés en la sanidad y estamos mirando la posibilidad de hacer otro convenio sanitario en Chile. Eso va más lento porque ellos están metidos en la legalización de asociación, pero también estará en estudio el próximo año. Tenemos también un acuerdo de tipo socio-sanitario en Uruguay, en el Hogar Español que hay a las afueras de Montevideo, cerca de Carrasco; vamos a subvencionar plazas para los madrileños. Es un centro en el que se ve una calidad humana fantástica, donde no hay colores políticos ni partidismo y la gente funciona junta. Tanto en el Hogar Español de Santiago de Chile como en el de Montevideo, que va a poner en funcionamiento un centro de día, estableceremos alguna colaboración en beneficio de los madrileños.
P. Parece que le ha dado tiempo a muchas cosas
R. Me tenía que haber dado tiempo a más pero los plazos son complicados. Estoy muy orgullosa del trabajo que estamos realizando, creo que es reconfortante, sé que no todo el mundo se queda contento porque esto pasa siempre, yo tampoco me quedo todos los días contenta y me da rabia no poder llegar a más cosas, pero creo que estamos sentando unas bases sólidas y que tratamos de que la gente sienta que hay un apoyo y un contacto muy directo de esta Agencia, en la que todo el mundo sabe quiénes somos, nos pone la cara.
Nuestro consejero, el de Presidencia, Justicia e Interior, Francisco Granados, que ha ido en varias ocasiones a Buenos Aires y a Montevideo, tiene una sensibilidad especial; fue él el que se lanzó y dijo que había que hacer una gran Casa de Madrid en Buenos Aires, que esto era importante y que vino con el corazón roto de ver cómo la Administración no se había ocupado y preocupado de la emigración.
La verdad es que este año para mí ha sido especial; la presidenta fue a Argentina y eso fue un espaldarazo para la Agencia. Quedó encantada, el acto salió francamente bien y tuvo transcendencia en muchos medios de comunicación. Yo creía que era necesario que fuese y que lo viese, porque además ella me pedía ese trabajo de campo, y a nosotros el viaje nos puso en órbita y nos dio una fuerza tremenda.
P. ¿Cuáles serán sus próximos desplazamientos, a qué colectividades visitará, si es que lo tiene previsto, en los próximos meses?
R. Quiero rematar el año haciendo algo más. Tenemos el proyecto de hacer algo importante en Miami, donde tenemos una comunidad muy numerosa y mucha emigración joven. Creo que el 12 de octubre este año voy a ir a México para celebrar con la gente de allí el Día de la Hispanidad, pero todavía no sé si será posible [la entrevista se hizo el 25 de septiembre] y quiero finalizar el año haciendo algo en Europa. Tengo claro que mientras esté en esta Agencia los 12 de octubre hay que pasarlos fuera y aprovechar para conocer a los madrileños, para conocer a la colectividad, para ver cómo se celebra y para aprender también.
En la Comunidad, con el plan de austeridad nos han pedido que tratemos de racionalizar los viajes, yo siempre trato de hacerlo pero ahora lo pienso más e intento ir con más tiempo y con la agenda cerrada a todos los niveles, de madrileños, de colectividad, de embajadas, de asociaciones, de cámaras de comercio, de empresas españolas, etc.
Y antes de fin de año mi voluntad es ir a Francia, a Saint Denis, cerca de París, donde hay un Consejo de Madrileños, ellos lo llaman así, Consejo de Madrileños, que dirige un señor que está involucrado en la Cruz Roja y sabe muchísimo de asociaciones y de voluntariado, se llama José Antonio Sotelino, ha estado en Madrid a visitarnos y quiero ir a reunirme con ellos, contar con ellos, porque es gente que lleva mucho tiempo rodada en el asociacionismo y además en Europa, y en Francia, tenemos una cantidad importante de madrileños residiendo.
P. Madrid es una de las comunidades autónomas que más retorno recibe, supongo que también lo tienen en cuenta.
R. El retorno es otro de los puntales que tenemos en el plan bianual de la emigración; en la Comunidad de Madrid es mucha la gente que, a edades totalmente dispares y de países totalmente dispares, quiere volver. Nos enteramos de que existía en la Comunidad la asociación de retornados ‘Apoyar’ y contactamos con ella ya antes de crear la Agencia. Desde el primer momento tuvimos claro que teníamos que trabajar juntos y ahora vamos a firmar un procolo de intenciones para fundamentar y dar forma jurídica al de colaboración que firmaremos el próximo año, que a nosotros nos da seguridad porque es gente con un reconocimiento bárbaro.
P. ¿Estaba antes en la dirección regional del PP?
R. Sí. Fui jefa de prensa del partido seis años, cuando era Pío García Escudero el presidente, luego ligué mi futuro político con Esperanza Aguirre; en el último Comité Ejecutivo ella me metió en el Comité como vocal de libre designación de la presidenta y cuando se planteó el congreso ya había comentado con ella que creía importante crear un apartado de emigración.
P. ¿Qué repercusión puede tener para los madrileños en el exterior el hecho de que ahora exista ese área?
R. Creo que con la creación de este área el PP de Madrid cierra el círculo y el compromiso que adquirió con los madrileños cuando en el programa electoral por primera vez se habla de una preocupación por el madrileño residente en el exterior. El PP de Madrid tenía una comisión de estudio sobre la emigración, en la que yo estaba, como estoy dentro de la nacional; en Madrid probablemente le faltaba impulso porque no había nada creado en el Gobierno y no tenía presupuesto. Ahora quiero dar un nuevo impulso a este área y que en la página web del PP de Madrid haya un sitio para las personas que contactan desde fuera, con las políticas que se están llevando a cabo y los temas sobre los que vamos a discutir.
P. También en la dirección nacional del PP se ha creado un nuevo departamento para la emigración muy recientemente, la misma semana en la que se celebraba el congreso del PP de Madrid se nombraba a Alfredo Prada director del mismo.
R. Sí, fue casi al mismo tiempo. Yo ya tenía hablado con la presidenta lo de crear este área de emigración y ella lo vio siempre bien. Hasta ahora, sin tener este área específica de emigración en el regional, nuestro responsable había sido Rafael Rodríguez-Ponga, con el que siempre he tenido una fantástica coordinación y su apoyo para todo y no dudo de que vaya a ser igual con Alfredo Prada, al que además conozco porque ha sido miembro del gobierno de esta Comunidad. Le he pedido una cita; sé que él está ahora con una agenda apretada pero quería dejar constancia de que estoy a su disposición para todo lo que el partido requiera.
P. Sin embargo, se entendió que Prada salió del gobierno de la Comunidad castigado por Aguirre tras haberse producido un acercamiento por su parte a Rajoy en el congreso nacional que el PP celebró el verano pasado. ¿Esto podría tener incidencia en sus relaciones?
R. Estoy segura de que en el trabajo en la emigración, desde luego por lo que al PP de Madrid respecta y a mi área, al contrario. Creo que a mí me da una ventaja sobre el resto porque a lo mejor conozco más a Alfredo Prada o puedo haber tenido más trato con él del que puedan haber tenido en otras comunidades, porque nos hemos visto en la sede de la Comunidad de Madrid con cierta frecuencia. Creo que es bueno que se cree esta oficina de emigración a nivel nacional y que haya un responsable con mando en plaza, digamos, que eso va a ser bueno para todas las comunidades en las que gobierna el PP y en las que no, y para todas las sedes que hay del PP fuera de España, que están siempre deseosas de atención del partido central, como no puede ser de otra manera.
P. ¿Cómo son sus relaciones con el Gobierno, hay colaboración? ¿Y en el Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE), en el que es ahora cuando se ve la presencia de Madrid?
R. Antes de todo esto, la Comunidad no tenía un área destinada a la emigración. Sé que durante algún tiempo fue Inmigración quien representaba en el CGCEE a la Comunidad de Madrid; desde el momento en el que me hicieron responsable de los temas de emigración de la Comunidad de Madrid, de crear la Agencia, nosotros hemos participado activamente en todo. ¿La colaboración? Pues estamos informados de todo lo que hay en el Consejo; creo que el Consejo está bastante politizado, supongo que siempre habrá sido así, de un lado y de otro lado. Mi voluntad es de colaboración total, con todas las administraciones estatales y con el Consejo General. El Gobierno central es una piedra angular para todas las políticas de emigración; lógicamente de ellos dependen las pensiones asistenciales y un montón de inversiones.
El Consejo creo que está un poco anquilosado y que habría que darle mayor movilidad a los temas que trata, tengo la impresión de que a veces nos quedamos un poco dormidos en los laureles, que ponemos la primera piedra pero luego somos incapaces de concretar. Al final, cada uno viene de un sitio, cada uno hace una labor, defiende a sus representados y yo ante cosas tan generales estoy más por centrar, aunque luego tengamos que ir sumando cosas, pero sí por centrarlo e impulsarlo porque si no las políticas se harán igualmente y el Consejo perderá la posibilidad de ser la bandera de esas políticas.
P. La entrada en vigor de la reforma de la nacionalidad a final de año es uno de los asuntos que más expectación está teniendo de entre los relacionados con los residentes en el exterior. Se celebra ahora [fue el último fin de semana de septiembre] el Congreso de Jóvenes Descendientes de Españoles, que comenzaron a reivindicar el acceso a la nacionalidad para los nietos y se ha oído en algún momento que podrían requerirles que demuestren vinculación con el país, ¿qué opina de esto?
R. Me hubiese gustado mucho que me invitasen a este Congreso de Jóvenes Descendientes que creo que se celebra en Mendoza este fin de semana. Me he enterado por vuestros medios de comunicación pero si me hubiesen invitado hubiese ido porque me parece de suma importancia, especialmente con la entrada en vigor de la reforma de la nacionalidad, un tema que creo que está claro pues el nuevo Estatuto reconoce la nacionalidad a los nietos; sobre esto ha habido acuerdo y esto es lo que vale, tengan vinculación o no, supongo que tendrían que haberlo pensado antes. Con el tema de la nacionalidad creo que tenemos estar preparados, en el mejor de los sentidos, porque esto va a crear un efecto ‘llamada’ importante sobre todo en Iberoamérica donde poder optar a la nacionalidad española abre muchas vías a las nuevas generaciones, que ven una posibilidad de abrirse a Europa. Aparte, a nadie se nos escapa que esto, a nivel electoral va a suponer un desequilibrio con lo que tenemos ahora. Falta por ver si realmente la Administración central se ha preparado para hacer la tramitación de los nuevos pasaportes que se van a tener que hacer.
P. Otro gran tema de debate, parlamentario en este caso, es la reforma del procedimiento del voto del exterior, ¿qué opina?
R. En el PP, y yo lo creo a pies juntillas, defendemos el voto en urna. Creo que es la medida más democrática que podemos ofrecer a nuestros residentes en el exteior.
P. Dicen que es muy complicado y también se habla de la posibilidad, aunque no inminente, del voto eletrónico.
R. Bueno, el voto en urna es muy complicado a nivel logístico y el voto electrónico es muy complicado a nivel de seguridad. Sería partidaria del voto electrónico pero no sé si estamos preparados para garantizarlo y cuando sea seguro también creo que a la gente hay que educarla, que esto hay que explicarlo y dar seguridad y eso lleva su tiempo. El voto en urna haría desaparecer mucha de la leyenda que hay en torno a qué pasa con el voto de fuera; es una medida que garantiza que ese voto sea democrático, seguro e igualitario y lo defenderemos, con toda su complejidad.
P. Las previsibles nuevas nacionalizaciones pueden tener especial incidencia en las elecciones en Madrid, en cuyo censo se inscribe mucha gente, aunque no sea madrileña. ¿Es partidaria de que pueda votar toda la gente que está fuera? ¿Qué piensa del planteamiento del BNG de limitar ese derecho?

R. Defiendo lo que defiende nuestra Constitución y es que todo el que tenga la nacionalidad tiene el derecho al voto.