SE EXHIBIRÁ EN LA UNIVERSIDAD HASTA EL 7 DE DICIEMBRE
La Casa de Galicia en Madrid expone sus fondos artísticos en Santiago de Compostela
Cuarenta y cinco cuadros y siete esculturas pertenecientes a la pinacoteca de la Casa de Galicia en Madrid se exponen desde el pasado miércoles en la Iglesia de la Universidade de Santiago de Compostela.

Cuarenta y cinco cuadros y siete esculturas pertenecientes a la pinacoteca de la Casa de Galicia en Madrid se exponen desde el pasado miércoles en la Iglesia de la Universidade de Santiago de Compostela. Bajo el título de ‘A casa habitada’, los compostelanos podrán disfrutar durante un mes de los trabajos de Manuel Abelenda, María Gato, Jorge Castillo, Lomarti o Sucasas, ya que después se trasladará a la localidad orensana de Lobios. Así pues, “queremos que los cuadros vayan más allá de las ciudades”, explicó el director de la Casa de Galicia , Alfonso Sobrado Palomares.
Con esta exposición, se pretende mostrar “un panorama representativo de la colección de la Casa de Galicia”, una institución que desde su puesta en funcionamiento hace 16 años ha logrado tanto de forma directa como mediante la organización de exposiciones en el edificio del Casado del Alisal, detrás del Museo del Prado, crear una pinacoteca de 202 piezas. Esto ha sido posible porque, como afirma Palomares, “cada pintor que expone en la Casa de Galicia, cede una obra para la colección”.
Entre el arte que no ha viajado se encuentran los grandes del movimiento renovador de los años treinta: Luís Seoane, Manuel Colmeiro o Carlos Maside, y es que, según Palomares, “no los movemos de allí”.
Así pues, argumenta que el título de la exposición se debe a que “la Casa de Galicia es una casa habitada por el talento de los artistas gallegos”.
Además de este fondo permanente, este organismo también acoge exposiciones temporales. Tanto es así, que “el mes que viene habrá dos obras más en nuestra pinacoteca”, comentó, “y ahora, inmediatamente habrá una muestra de Virxilio y después una antológica de Prego”.
Pero, en la Casa de Galicia en Madrid no todo es arte, ya que también se organizan debates, ciclos de música, ‘de techno a folk’, danza o recitales poéticos coordinados por el escritor Neda Vicente Araguas –‘Estacións poéticas’– que se integran en las “labores culturales” a las que se refiere Sobrado Palomares respecto del “escenario de las resonancias gallegas en Madrid”.
Además de encargarse de la realización de estas actividades, la Casa de Galicia en Madrid funciona como una oficina administrativa y de registro que fue creada durante el gobierno de Manuel Fraga en 1992.
Con esta exposición, se pretende mostrar “un panorama representativo de la colección de la Casa de Galicia”, una institución que desde su puesta en funcionamiento hace 16 años ha logrado tanto de forma directa como mediante la organización de exposiciones en el edificio del Casado del Alisal, detrás del Museo del Prado, crear una pinacoteca de 202 piezas. Esto ha sido posible porque, como afirma Palomares, “cada pintor que expone en la Casa de Galicia, cede una obra para la colección”.
Entre el arte que no ha viajado se encuentran los grandes del movimiento renovador de los años treinta: Luís Seoane, Manuel Colmeiro o Carlos Maside, y es que, según Palomares, “no los movemos de allí”.
Así pues, argumenta que el título de la exposición se debe a que “la Casa de Galicia es una casa habitada por el talento de los artistas gallegos”.
Además de este fondo permanente, este organismo también acoge exposiciones temporales. Tanto es así, que “el mes que viene habrá dos obras más en nuestra pinacoteca”, comentó, “y ahora, inmediatamente habrá una muestra de Virxilio y después una antológica de Prego”.
Pero, en la Casa de Galicia en Madrid no todo es arte, ya que también se organizan debates, ciclos de música, ‘de techno a folk’, danza o recitales poéticos coordinados por el escritor Neda Vicente Araguas –‘Estacións poéticas’– que se integran en las “labores culturales” a las que se refiere Sobrado Palomares respecto del “escenario de las resonancias gallegas en Madrid”.
Además de encargarse de la realización de estas actividades, la Casa de Galicia en Madrid funciona como una oficina administrativa y de registro que fue creada durante el gobierno de Manuel Fraga en 1992.