Unos ochenta jóvenes gallegos, residentes en diferentes países de Europa, llegaban el pasado viernes al albergue juvenil ‘Haus der Jugend’ en Frankfurt, para participar en el ‘I Congreso da Xuventude Galega Residente en Países Europeos’, un encuentro organizado por la Secretaría Xeral de Emigración, en colaboración con el Consello da Xuventude de Galicia. Les esperaban el secretario xeral de Emigración de la Xunta, Manuel Luis Rodríguez, que ya el día anterior había visitado el Centro Gallego de Hannover, y la presidenta del Consejo de la Juventud de Galicia, María Dolores Rodríguez Amoroso.
En el congreso participaron, además, el director xeral de Comunicación Audiovisual, Manuel José Fernández Iglesias; el director xeral de Formación y Colocación, Pastor Fuenteseca Díaz; el director xeral de Formación Profesional y Enseñanzas Especiales, Antonio Vázquez Vázquez; y el subdirector xeral de Centros y Comunidades Gallegas, Carlos Sixirei Paredes.
Las bases para este encuentro en Frankfurt se habían sentado ya durante una reunión previa con algunos representantes de las asociaciones de varios países, celebrada el pasado mes de abril en París, con el fin de estudiar los cauces de aprovechamiento recíproco entre la juventud gallega del exterior y la sociedad en Galicia.
Durante los tres días que duró el congreso, los asistentes tuvieron oportunidad de escuchar a los enviados de la Xunta, exponer sus puntos de vista sobre situaciones que les afectan, no sólo en el momento actual, sino también de cara al futuro, y debatir sobre qué estrategias serían las más convenientes para reforzar su participación en los temas de interés para Galicia, en materia de juventud.
Un encuentro histórico
Por primera vez en la historia de la emigración gallega en Europa tiene lugar un congreso orientado a la juventud, un hecho que, en opinión de muchos, refleja que Galicia no quiere perder a sus ciudadanos jóvenes residentes en los países de Europa, los hijos y nietos de emigrantes que en los años sesenta y setenta del siglo XX salieron de Galicia para trabajar y mejorar, no sólo su situación personal, sino la de todos los gallegos.
Cada vez con más intensidad en los últimos años, Galicia busca el contacto con los gallegos jóvenes de la diáspora, ofreciéndoles la posibilidad de mantener la relación con la tierra de sus antepasados, sea mediante becas de estudio, ofertas de vacaciones o apoyando programas orientados a este colectivo dentro de las asociaciones, ya que los dirigentes políticos se han dado cuenta de que el potencial que ofrece esta generación joven, bien preparada por lo general, no debe perderse para Galicia. Darles la posibilidad de sentirse partícipes de la sociedad gallega fuera de las fronteras territoriales de la Comunidad, ofrecerles alternativas que respondan a sus intereses y necesidades actuales, mostrarles que se les tiene en cuenta y que su opinión vale, fue el objetivo de este encuentro en Frankfurt, en el que también se quería buscar respuestas para las demandas de los jóvenes y fomentar su participación en el movimiento asociativo.
Al lado del colectivo de las chicas y chicos gallegos nacidos fuera de Galicia, asistían al congreso algunos representantes de los nuevos emigrantes, jóvenes que por razones de oportunidades profesionales trasladaron su residencia a otros países vecinos en Europa.
Acto inaugural
El congreso comenzó con puntualidad germana. A las siete y media de la tarde, el secretario xeral de Emigración de la Xunta, Manuel Luis Rodríguez; la presidenta del Consejo de la Juventud de Galicia, Mª Dolores Rodríguez Amoroso; y el director xeral de Comunicación, Manuel José Fernández Iglesias, saludaban a los asistentes e inauguraban el congreso.
María Dolores Rodríguez Amoroso y Manuel Luis Rodríguez dieron la bienvenida a los asistentes y presentaron el programa. El secretario xeral explicó por qué se había decidido organizar el encuentro y aseguró que la decisión de “dar este paso” se había tomado después de un profundo análisis de la situación de la juventud gallega en Europa. “Primero preparamos el terreno”, dijo el político, “ahora estamos echando la simiente” y, añadió, “es un germen que tiene que germinar”.
Rodríguez aseguró que desde la Secretaría Xeral de Emigración se tenían “ideas muy interesantes de cara al futuro”, ideas que realizadas tendrían dos vertientes de aprovechamiento, una hacia los propios jóvenes y otra hacia la Xunta de Galicia, que desea que el colectivo tenga más posibilidades de participación desde la emigración, en todos los ámbitos.
Para ello, lo primero sería facilitarles el acceso a la información de toda la actualidad de Galicia y conseguir que no haya nadie que, por desconocimiento, deje de participar o aprovechar de los programas concebidos y orientados para la juventud gallega del exterior, “porque tenéis derecho de saber”, subrayó el secretario xeral, y se refirió especialmente a los programas de formación profesional y universitaria, de los que pueden beneficiarse, y a los apoyos al empleo y demás ayudas a las que pueden tener acceso.
Finalmente, habló también de los canales de comunicación entre la juventud gallega de cualquier país del mundo a través de la red y de las ventajas que ofrece.
Refiriéndose al congreso, explicó que se buscó la comunicación directa con los jóvenes porque, durante sus viajes a diferentes países de Europa se diera cuenta, y algunos jóvenes se lo confirmaron, de que había quien desconocía los programas. “La comunicación falló en los centros gallegos, que son los que reciben toda la información”, lamentó el secretario xeral, pero dijo también que no en todos había fallado, “no se puede generalizar”, puntualizó. Recordó también que los jóvenes gallegos del exterior tienen derecho, no sólo a los programas específicos para la emigración, sino que tienen que “disfrutar de todos los derechos de los que gozan los chicos y chicas que residen en Galicia”.
Otro de los propósitos de la Secretaría Xeral de Emigración es apoyar el movimiento cultural que se está produciendo entre la juventud gallega en Europa, al margen de las asociaciones, “a los que éstas no supieron dar espacio”, y citó ejemplos como el caso de ‘Ialma’, ‘Mafia Gallega’ y ‘Gran Purismo’, grupos de música formados por hijos de emigrantes gallegos en Bélgica y Suiza, también presentes en el congreso.
Seguidamente, los jóvenes tuvieron ocasión de escuchar al director xeral de Comunicación Audiovisual, Manuel José Fernández Iglesias, que trato el tema de la comunicación y el sector audiovisual en la Comunidad gallega. Habló del cine gallego, de las posibilidades de apoyo que Galicia ofrece para promocionar su cultura en el exterior, del apoyo a creadores gallegos de la actualidad, pero también de los cambios fundamentales que se produjeron en la sociedad gallega en los últimos años en cuanto a acceso a información y uso de las nuevas tecnologías. El esfuerzo por conseguir, dos años antes que en el resto de Europa, el cambio a la televisión digital, y el desarrollo de las tecnologías punta que se están exportando a otros países europeos, como el sistema de TV de Finlandia, que se hizo con tecnología gallega, muestran que Galicia ya no es la Comunidad rural y campesina del pasado.
Programas para el esparcimiento
Terminado el acto inaugural, se proyectó ‘Pradolongo’, el filme gallego premiado con el ‘IV Premio Ciudad de San Sebastián Film Comissión’ en el último Festival de Cine de San Sebastián, del director orensano, Ignacio Vilar. El cineasta gallego acudió también a Frankfurt, acompañado de los actores protagonistas, Tamara Canosa, Rubén Ríos y Roberto Porto, con el fin de promocionar la película fuera de España, y comentar, en una charla-coloquio con los jóvenes, los diferentes aspectos de la sociedad gallega reflejados en el largometraje. El debate después de la proyección puso de relieve las diferentes visiones de la sociedad gallega desde el exterior y, también, por parte de los jóvenes protagonistas de la película, el desconocimiento que se tiene en la Galicia territorial de la existencia de una juventud gallega que también se interesa y participa, o quiere participar, de las tendencias contemporáneas de la cultura de Galicia desde otros países.
El mayor activo con que puede contar un país
El secretario xeral de Emigración definió el encuentro como “un importante espacio para estimular la participación de las chicas y chicos gallegos que residen fuera de Galicia en la toma de las decisiones que les afectan de forma directa y que, por extensión, afectan al futuro de toda Galicia”. Para Manuel Luis Rodríguez, la juventud es “el mayor activo con que puede contar cualquier país”, pero además, “la juventud gallega tiene un valor añadido, que le confiere su importante presencia en tantos países del mundo, por lo que las posibilidades recíprocas entre Galicia y nuestra juventud en el exterior son innumerables”, aseguró.
A través de este encuentro en la capital alemana de las finanzas, fue posible establecer un contacto directo entre los responsables de Emigración y Juventud de Galicia y los jóvenes asistentes, representantes de la juventud en las asociaciones de gallegos de Alemania, Bélgica, Francia, Holanda, Portugal, Reino Unido, Suiza y Andorra.