Izquerda Unida se presenta con 575 propuestas autonómicas
Izquierda Unida de Castilla y León apuesta, entre las 575 propuestas de su programa electoral para las elecciones autonómicas del próximo 22 de mayo, por las personas, por la justicia social y ambiental, así como por los servicios públicos de calidad para la cohesión social.
La formación apela a los castellanos y leoneses para que les apoyen para llevar a cabo políticas públicas dirigidas a combatir “las viejas y nuevas desigualdades que en Castilla y León castigan a amplios sectores”. Frente a las políticas de derecha, “ultraliberales, privatizadoras y de pérdida de derechos sociales, el 22 de mayo hay una oportunidad de condicionar las políticas para que los castellanos y leoneses que no han generado la crisis no la sigan pagando”.
En su programa electoral, Izquierda Unida aboga por una planificación democrática de la economía con apoyo financiero a empresas, gestión compartida y participación del trabajador como accionista y empleo con representación en el capital de los trabajadores. “Esta condición será indispensable para que se concedan ayudas a empresas”.
En concreto, apuesta por la rehabilitación urbana, los empleos verdes, las energías renovables y la agricultura y la ganadería, el transporte colectivo y la automoción, entre otros sectores prioritarios.
Además, en materia de empleo, Izquierda Unida es partidaria de la Renta Básica de Ciudadanía como “modelo universal” pero avanza que establecerán un salario social para todos los empleados que se encuentren en paro, en tanto no se reincorporen al mercado laboral, al tiempo que apuestan por rediseñar y potenciar las políticas activas de empleo, así como la ampliación y mejora del empleo público. También prevé, en materia económica, un plan contra el fraude fiscal y la economía sumergida y otro de austeridad del gasto público.
Izquierda Unida plantea también en su programa electoral una Ley de comarcalización porque, a su juicio, la comarca mejora el bienestar de la población y por ello, se compromete a reformar la Ley de Ordenación del Territorio y por la supresión de las diputaciones provinciales, “una apuesta clara de IU”.
En energía, apuesta por declarar a Castilla y León como “comunidad no nuclearizada” y trabajará por la eficiencia y la apuesta por las energías alternativas.
El programa incluye la supresión del proceso de privatización de los servicios públicos, así como la modificación de la nueva Ley de Servicios Sociales de Castilla y León.
La formación apela a los castellanos y leoneses para que les apoyen para llevar a cabo políticas públicas dirigidas a combatir “las viejas y nuevas desigualdades que en Castilla y León castigan a amplios sectores”. Frente a las políticas de derecha, “ultraliberales, privatizadoras y de pérdida de derechos sociales, el 22 de mayo hay una oportunidad de condicionar las políticas para que los castellanos y leoneses que no han generado la crisis no la sigan pagando”.
En su programa electoral, Izquierda Unida aboga por una planificación democrática de la economía con apoyo financiero a empresas, gestión compartida y participación del trabajador como accionista y empleo con representación en el capital de los trabajadores. “Esta condición será indispensable para que se concedan ayudas a empresas”.
En concreto, apuesta por la rehabilitación urbana, los empleos verdes, las energías renovables y la agricultura y la ganadería, el transporte colectivo y la automoción, entre otros sectores prioritarios.
Además, en materia de empleo, Izquierda Unida es partidaria de la Renta Básica de Ciudadanía como “modelo universal” pero avanza que establecerán un salario social para todos los empleados que se encuentren en paro, en tanto no se reincorporen al mercado laboral, al tiempo que apuestan por rediseñar y potenciar las políticas activas de empleo, así como la ampliación y mejora del empleo público. También prevé, en materia económica, un plan contra el fraude fiscal y la economía sumergida y otro de austeridad del gasto público.
Izquierda Unida plantea también en su programa electoral una Ley de comarcalización porque, a su juicio, la comarca mejora el bienestar de la población y por ello, se compromete a reformar la Ley de Ordenación del Territorio y por la supresión de las diputaciones provinciales, “una apuesta clara de IU”.
En energía, apuesta por declarar a Castilla y León como “comunidad no nuclearizada” y trabajará por la eficiencia y la apuesta por las energías alternativas.
El programa incluye la supresión del proceso de privatización de los servicios públicos, así como la modificación de la nueva Ley de Servicios Sociales de Castilla y León.
