CONGRESO INTERNACIONAL EL ASOCIACIONISMO DE LA EMIGRACIÓN ESPAÑOLA EN EL EXTERIOR: SIGNIFICACIÓN Y VINCULACIONES

Fernández considera que el asociacionismo se desarrolló de manera paralela en Buenos Aires y Montevideo

Alejandro E. Fernández, de la Universidad Nacional de Luján (Argentina), expuso las semejanzas y diferencias en el asociacionismo entre Argentina, Uruguay y Chile, en su ponencia titulada ‘El asociacionismo español en el cono sur de América: una visión comparativa’.
Fernández considera que el asociacionismo se desarrolló de manera paralela en Buenos Aires y Montevideo
 Elda E. González, Núñez Seixas y Alejandro E. Fernández.
Elda E. González, Núñez Seixas y Alejandro E. Fernández.
Alejandro E. Fernández, de la Universidad Nacional de Luján (Argentina), expuso las semejanzas y diferencias en el asociacionismo entre Argentina, Uruguay y Chile, en su ponencia titulada ‘El asociacionismo español en el cono sur de América: una visión comparativa’ y explicó cómo entre Buenos Aires y Montevideo había una relación muy fluida y las instituciones que se creaban a un lado del Río de la Plata tenían su reflejo en el otro lado.
Fernández explicó como la primera asociación de socorros mutuos en Buenos Aires se crea como reflejo de la de Montevideo que, a su vez, había sido creada como reflejo de una de Rosario. “En el caso de Chile existe menos reciprocidad pero también existe, sobre todo el caso de Cataluña”, una de las más influyentes de la zona. De hecho, explica, “cuando llegan los exiliados catalanes entran por Mendoza usando contactos entre los catalanes de Chile y Mendoza”.
El profesor de la Universidad de Luján también explicó del mutualismo, un sistema de asociacionismo que abarcaba, sobre todo a los españoles. “El sistema utilizado en Uruguay para la extensión del mutualismo era mandar delegados a otros zonas mientras que en Argentina el sistema se extendió desde el centro de Buenos Aires a la periferia y luego a las localidades del interior”. Fernández también explicó que “en Chile el sistema más dominante era el de beneficencia no el mutualista”.
Otro de los puntos que abordó Fernández en su ponencia fue la necesidad de contar con sectores medios y pudientes para poder sostener las mutuales. “Esto era decisivo, ya que además de la cuota de participación existían otros ingresos como donaciones, préstamos o venta de acciones. “Incluso en muchas ocasiones, los sectores más altos no cobraban todas las prestaciones a las que tenían derecho”, comenta Fernández quien recuerda que “si el mutualismo funcionaba de manera eficiente derivaba a otra asociación de tipo cultural o recreativa”.