El escritor andaluz Miguel Ángel Martínez destacó la huella de Andalucía en la capital cubana
El Centro Andaluz de la Habana contó con la visita del máster en Investigación en Artes, Música y Educación Estética, doctor en Humanidades y Ciencias Sociales en el programa de Patrimonio en la Universidad de Jaén; pero sobre todo maestro de profesión y corazón, Miguel Ángel Martínez Pozo. Escritor de varios libros y artículos de renombre y reconocimiento tanto dentro como fuera de España, que muestran la Andalucía más desconocida, sus costumbres, su gente y sus raíces.
Pregunta. ¿Es la primera vez que visita la isla?
Respuesta: Sí, es la primera vez que visito Cuba y para mí es una experiencia muy gratificante ya que estoy conociendo, disfrutando, viviendo y sintiendo su rico patrimonio, tanto material como inmaterial, en el que la huella andaluza está presente.
La primera comida que pude saborear fue ‘moros y cristianos’. Un plato cuyos orígenes son desconocidos pero que en sí mismo a mí me hace recordar un pasado histórico pero, pero encima de todo, ni más ni menos, que el hermanamiento, la fusión o unión entre culturas donde se ha de convivir en paz y armonía.
P. ¿Qué puede decirnos de su visita al Centro Andaluz de La Habana?
R. El Centro Andaluz es un lugar de divulgación, conocimiento, promoción y conservación de la memoria, la huella y la identidad andaluza. Me he sentido como en casa y agradezco enormemente a su presidente su hospitalidad y recibimiento en el mismo, pudiendo conocer sus instalaciones así como las actividades que se llevan en él.
P. Nos informa que piensa donar dos ejemplares de su obra al Centro Andaluz, gesto por lo cual le estamos agradecidos.
R. Así es, dono ambos ensayos a su biblioteca para que sirvan, tanto para lectores del presente con inquietudes por saber más sobre nuestra rica tierra, como para futuras generaciones interesadas en investigar sobre aquellos lazos comunes que tenemos cubanos y andaluces fruto de la historia que nos une.
Miguel Ángel Martínez donó sus libros más recientes ‘Andalucía, tierra de Moros y Cristianos’ y ‘Los orígenes ocultos de la Semana Santa Andaluza’, fruto de su empeño y labor investigativa. Estos ejemplares, junto con los de Antonio Manuel Rodríguez Ramos, honran la vitrina del Salón Blas Infante, ejemplo de la amistad entre cubanos y andaluces, más allá de las fronteras que separan geográficamente ambas comunidades.
