EL PRESIDENTE DE LA INSTITUCIÓN INFORMÓ A LOS SOCIOS QUE YA SE INICIÓ LA REMODELACIÓN DEL SALÓN DEL SUBSUELO
El Centro Salamanca de Buenos Aires conmemoró su 89º aniversario
El Centro Salamanca celebró, el domingo 3 de julio, el 89º aniversario de su fundación, con un banquete que reunió en la sede social ‘José Sánchez Fuentes’ a socios, familiares y amigos. El coro del Centro Salamanca, dirigido por Liliana Montiel, dio la nota en los festejos, interpretando un repertorio de canciones tradicionales salmantinas y españolas que el público también pudo seguir porque se entregaron copias con la letra de alguna de las canciones.
El Centro Salamanca celebró, el domingo 3 de julio, el 89º aniversario de su fundación, con un banquete que reunió en la sede social ‘José Sánchez Fuentes’ a socios, familiares y amigos. El coro del Centro Salamanca, dirigido por Liliana Montiel, dio la nota en los festejos, interpretando un repertorio de canciones tradicionales salmantinas y españolas que el público también pudo seguir porque se entregaron copias con la letra de alguna de las canciones. Durante la celebración, el presidente de la institución, Joaquín Rebollo, informó a los socios que ya comenzaron las obras de remodelación del salón del subsuelo.
Un proyecto, que esperan terminar a fin de año o a más tardar los primeros meses del año que viene, y que quieren inaugurar con una muestra titulada ‘Salamanca en el recuerdo’. Será una exposición que dé cuenta de la emigración salmantina en Buenos Aires, que reunirá fotos, documentación (partidas de nacimiento, pasaportes, etc.) y objetos (como pueden ser vestimentas, baúles, etc.). Todos los elementos que puedan aportar los socios para la muestra, aclaró Rebollo serán devueltos a sus dueños, en tiempo y forma, al término de la exposición.
En la comida, el presiente electo de la casa recordó que el año pasado los directivos decidieron ponerle el nombre de un expresidente a la sala de reuniones; sala Manuel de Celis. “Pero cuando lo hicimos él ya había partido”, indicó; “a partir de ahora –ahondó– nosotros queremos homenajear a las personas cuando estén con nosotros”. “Queremos tener la oportunidad de decirles que los queremos, que estamos contentos de ser sus amigos, que los podemos mirar a los ojos, que podemos compartir una taza de café, que nos podemos reír y/o llorar juntos; queremos que sientan el calor de todos nosotros”, concluyó el directivo.
Durante su intervención, Rebollo indicó que el primer homenajeado, de una lista más amplia, era el presidente saliente de la institución, Manuel Pascua. “Que el primer homenajeado fuera Pascua fue mi decisión personal”, dijo y fundamentó: “Él hace muchos años que integra la comisión directiva. Ha acompañado a los últimos cinco o seis presidentes de esta casa ocupando distintos lugares y cumpliendo diversas funciones, junto a su esposa. Fue una persona que acompañó en la década del 70, cuando mi papá fue presidente y después de 40 años asumo yo su hijo y él también está sentado en la comisión directiva, acompañándome”.
Pascua, emocionado
Durante la entrega de la plaqueta, el público lo ovacionó con aplausos y coreó su nombre. Pascua, emocionado, recordó que lleva varias décadas trabajando en y por la institución. “Después de pasar por muchos lugares –dijo–, llegué a ser presidente del Centro donde recibí problemas y satisfacciones”, dijo y adelantó que seguirá trabajando para esta institución mientras Dios le dé salud. Aunque aclaró que lo hará a la par de los nuevos dirigentes. “Todo tiene un ciclo –reflexionó– y ha llegado la hora de dejar la posta a otros que tienen raíces, que quieren la institución, que trabajan y que son honestos y responsables como el actual presidente, Joaquín Rebollo”.
En la fiesta, además, se entregaron sendas plaquetas a Filomena Moreno y a Faustino Muñoz, reconociéndolos socios vitalicios de la asociación, tras 50 años de socios ininterrumpido.
Un proyecto, que esperan terminar a fin de año o a más tardar los primeros meses del año que viene, y que quieren inaugurar con una muestra titulada ‘Salamanca en el recuerdo’. Será una exposición que dé cuenta de la emigración salmantina en Buenos Aires, que reunirá fotos, documentación (partidas de nacimiento, pasaportes, etc.) y objetos (como pueden ser vestimentas, baúles, etc.). Todos los elementos que puedan aportar los socios para la muestra, aclaró Rebollo serán devueltos a sus dueños, en tiempo y forma, al término de la exposición.
En la comida, el presiente electo de la casa recordó que el año pasado los directivos decidieron ponerle el nombre de un expresidente a la sala de reuniones; sala Manuel de Celis. “Pero cuando lo hicimos él ya había partido”, indicó; “a partir de ahora –ahondó– nosotros queremos homenajear a las personas cuando estén con nosotros”. “Queremos tener la oportunidad de decirles que los queremos, que estamos contentos de ser sus amigos, que los podemos mirar a los ojos, que podemos compartir una taza de café, que nos podemos reír y/o llorar juntos; queremos que sientan el calor de todos nosotros”, concluyó el directivo.
Durante su intervención, Rebollo indicó que el primer homenajeado, de una lista más amplia, era el presidente saliente de la institución, Manuel Pascua. “Que el primer homenajeado fuera Pascua fue mi decisión personal”, dijo y fundamentó: “Él hace muchos años que integra la comisión directiva. Ha acompañado a los últimos cinco o seis presidentes de esta casa ocupando distintos lugares y cumpliendo diversas funciones, junto a su esposa. Fue una persona que acompañó en la década del 70, cuando mi papá fue presidente y después de 40 años asumo yo su hijo y él también está sentado en la comisión directiva, acompañándome”.
Pascua, emocionado
Durante la entrega de la plaqueta, el público lo ovacionó con aplausos y coreó su nombre. Pascua, emocionado, recordó que lleva varias décadas trabajando en y por la institución. “Después de pasar por muchos lugares –dijo–, llegué a ser presidente del Centro donde recibí problemas y satisfacciones”, dijo y adelantó que seguirá trabajando para esta institución mientras Dios le dé salud. Aunque aclaró que lo hará a la par de los nuevos dirigentes. “Todo tiene un ciclo –reflexionó– y ha llegado la hora de dejar la posta a otros que tienen raíces, que quieren la institución, que trabajan y que son honestos y responsables como el actual presidente, Joaquín Rebollo”.
En la fiesta, además, se entregaron sendas plaquetas a Filomena Moreno y a Faustino Muñoz, reconociéndolos socios vitalicios de la asociación, tras 50 años de socios ininterrumpido.
