CONGRESO INTERNACIONAL EL ASOCIACIONISMO DE LA EMIGRACIÓN ESPAÑOLA EN EL EXTERIOR: SIGNIFICACIÓN Y VINCULACIONES

Ana Fernández Asperilla: “El movimiento asociativo sufre un intento de instrumentalización por parte de los gobiernos del siglo XX”

Durante su intervención en el Congreso Internacional sobre asociacionismo, Ana Fernández Asperilla, del Centro de Documentación de las Migraciones de la Fundación 1º de Mayo, hizo un repaso por el mundo asociativo en Europa desde la segunda mitad del siglo XX y aseguró que los gobiernos españoles del siglo XX han intentado instrumentalizar el movimiento asociativo de Europa.
Ana Fernández Asperilla: “El movimiento asociativo sufre un intento de instrumentalización por parte de los gobiernos del siglo XX”
Ana Fernández Asperilla, durante la presentación.
Ana Fernández Asperilla, durante la presentación.
Durante su intervención en el Congreso Internacional sobre asociacionismo, Ana Fernández Asperilla, del Centro de Documentación de las Migraciones de la Fundación 1º de Mayo, hizo un repaso por el mundo asociativo en Europa desde la segunda mitad del siglo XX y aseguró que los gobiernos españoles del siglo XX han intentado instrumentalizar el movimiento asociativo de Europa.
En su ponencia ‘El asociacionismo de la emigración española a Europa’ , Ana Fernández Asperilla explica que la red asociativa de los españoles en Europa comenzó en la segunda mitad del siglo XX y se consolida en los años 70 y 80. “Yo creo que los 80 son un punto de inflexión –explica Fernández Asperilla- porque hay un gran reconocimiento por parte las autoridades españolas pero hay un declive en cuento al número de centros y de emigrantes”.
Para Fernández este declive está relacionado con “el fin de ciclo de la emigración, el fin de las salidas de los años 70 por la crisis internacional y el retorno”.
El intento de instrumentalización del movimiento asociativo por parte los gobiernos del siglo XX tiene como objetivo “controlar a las colonias, fomentar el clientelismo, conseguir réditos electorales” y abarcar todos los aspectos de la vida que no se pueden alcanzar a través de los cauces gubernamentales.
En su ponencia, Fernández Asperilla distingue dos tipos de asociaciones: las que fueron impulsadas por el Gobierno o por la iglesia y las que surgen desde abajo. En el primer grupo encuadra el Hogar Español de Sant Denis y el Solar de Burdeos mientras que entre las segundas están la Asociación de trabajadores emigrantes en Suiza, la Colonia Española de Béziers y el Centro Español de Perpiñán.
En su ponencia, Fernández Asperilla explica que en Europa “no hay mutualismo porque fue una emigración más tardía y porque los países de acogida tenían un sistema de protección”. En este contexto, -explica- “las asociaciones de socorros mutuos pierden sentido porque las salidas de ese momento son asistidas y tienen derecho a los seguros sociales igual que cualquier autóctono”.
Esta emigración más tardía se centra en cuestiones culturales recreativas, identitarias y políticas.
Fernández Asperilla hizo un repaso exhaustivo por algunas de las instituciones como el Solar Español de Burdeos que nació porque un clérigo se da cuenta de la situación de pobreza de los trabajadores. El objetivo de esta institución que nace en 1920 es “instruir en la religión o inculcar a los trabajadores el amor a la patria”, sobre todo se centran en los trabajadores porque están en un “ambiente de laicidad”. El Solar, cuya presidencia de honor la ostenta Alfonso XIII y el cardenal de Burdeos, “pronto quiere descentralizar su actividad y crea capillas en los barrios con más españoles”. Además, crean aulas educativas con clase de religión y castellano, “para reforzar la identidad de origen”, ponen en marcha acciones caritativas y recreativas, entre otras.
A finales de los 30 y comienzos de los 40, la Falange convierte al Solar en su “centro de operaciones”. Una vez acabada la guerra en Francia ven a los comunistas españoles como héroes porque estuvieron en la resistencia y les han ofrecido protección contra los nazis. A partir de ese momento ya se evidencia una desafección de los trabajadores por las asociaciones de carácter religioso.
La historia del Hogar de Sant Denis es muy similar. También creada por curas, auspiciada por el Gobierno español y con una función más cultural y recreativa que mutualista.
Estos modelos de asociacionismo tiene “una función recreativa y social, una influencia católica, se extienden por Europa y establecen fuertes vínculos con el Gobierno español”.
En el grupo de instituciones creadas desde abajo, la responsable del Centro de Documentación de las Migraciones de la Fundación 1º de mayo destacó la Colonia Española de Béziers, una institución fundada en 1889 por trabajadores de diferentes ámbitos. Según explica Fernández Asperilla, también fundaron una asociación de socorros mutuos “pero es laica”. “Sin poder afirmar que está impulsada por el Gobierno tiene una relación estrecha y cuenta con una subvención importante”, explica Fernández.
Otro de los momentos de cambio del asociacionismo en Europa es la transición española. “La lucha antifranquista desaparece en el momento en que hay un incremento del retorno y hay nuevos factores que interesan como las cuestiones culturales, las reivindicaciones de los emigrantes, el envejecimiento y las segundas generaciones”, explica Fernández Asperillla quien asegura que el Congreso Democrático de las Asociaciones de Españoles Emigrantes celebrado en 1982 en Palma de Mallorca supuso una reafirmación para la colectividad en Europa.
Según explica Fernández Asperilla, el Congreso consigue darle una gran visualización al colectivo pero sobre todo se siente legitimados “en cuanto a su funcionalidad, a la consideración de que es un movimiento más tupido que el americano, tienen un perfil más reivindicativo, las asociaciones mantienen el contacto directo con los socios, reivindican los derechos de los emigrantes y su papel como elemento de integración”.
Fernández Asperilla recuerda que las asociaciones reivindican un incremento de las ayudas y recursos y recuerdan que tienen una actividad amplia y constante.
A partir de 1982 la evolución del asociacionismo en Europa es muy importante y hay que tener en cuenta varios factores decisivos como “la entrada de España en Europa, el envejecimiento de la población y el retorno”.
Para finalizar su intervención, Ana Fernández Asperilla recordó que con la entrada en vigor de la Ley de la Ciudadanía Española en el Exterior “las asociaciones han cambiado pero siguen teniendo un papel importante en la configuración de la identidad cultural”.