El Centro astur de La Rioja organiza una cata de sidra de mesa
Coincidiendo con el Festival Gastronómico de los Oricios, el Centro Asturiano de La Rioja celebró el pasado sábado, en su sede social de la calle Lardero, 39, bajo, de Logroño, una cata de sidra asturiana de mesa.
Coincidiendo con el Festival Gastronómico de los Oricios, el Centro Asturiano de La Rioja celebró el pasado sábado, en su sede social de la calle Lardero, 39, bajo, de Logroño, una cata de sidra asturiana de mesa.
La cata, que dio comienzo a las ocho de la tarde, se llevó a cabo gracias a la colaboración entre el Centro Asturiano de La Rioja y la revista enológica ‘La Sidra’. En ella participaron conocidos enólogos, catadores, bodegueros y hosteleros de La Rioja, y se presentaron hasta cinco muestras de sidras de mesa de lagares acogidos a la Denominación de Origen Protegida Sidra de Asturias.
La sidra asturiana de mesa es un tipo de sidra natural que, a diferencia de la sidra tradicional, no tiene “madre” en las botellas y no necesita ser escanciada, sino que se sirve directamente en copa similar a la de los vinos blancos y se consume igual que ellos. Por ello es un producto especialmente apropiado para su consumo en bares, cafeterías y restaurantes, así como en el propio hogar.
Tras la degustación se celebró el ya tradicional festival Gastronómico del Oriciu, uno de los mariscos más apreciados en la cocina asturiana, y que se puede tomar tanto en crudo, como hervido, en revuelto o en conserva.
La cata, que dio comienzo a las ocho de la tarde, se llevó a cabo gracias a la colaboración entre el Centro Asturiano de La Rioja y la revista enológica ‘La Sidra’. En ella participaron conocidos enólogos, catadores, bodegueros y hosteleros de La Rioja, y se presentaron hasta cinco muestras de sidras de mesa de lagares acogidos a la Denominación de Origen Protegida Sidra de Asturias.
La sidra asturiana de mesa es un tipo de sidra natural que, a diferencia de la sidra tradicional, no tiene “madre” en las botellas y no necesita ser escanciada, sino que se sirve directamente en copa similar a la de los vinos blancos y se consume igual que ellos. Por ello es un producto especialmente apropiado para su consumo en bares, cafeterías y restaurantes, así como en el propio hogar.
Tras la degustación se celebró el ya tradicional festival Gastronómico del Oriciu, uno de los mariscos más apreciados en la cocina asturiana, y que se puede tomar tanto en crudo, como hervido, en revuelto o en conserva.
