Álvarez-Cascos destaca “el compromiso de servicio de los nuevos consejeros”

El presidente del Principado, Francisco Álvarez-Cascos, ha aprovechado el acto de toma de posesión de los nuevos consejeros de su gobierno, celebrado el pasado lunes 18, para responder a aquellos que critican su asturianismo. Lo ha hecho tras agradecer al nuevo Consejo de Gobierno “su decisión de aceptar su propuesta y encargo, dedicar su capacidad de trabajo y experiencia al servicio de este país llamado Asturias”. Tras ello, recordó las palabras que él mismo, cuando era vicepresidente primero del Gobierno y ministro de la Presidencia, pronunció el 1 de abril de 1997 en el Teatro Campoamor de Oviedo, para recibir al expresidente de Estados Unidos George Bush.
En dicho discurso, Álvarez-Cascos aseguraba que “el Principado de Asturias que le acoge en esta jornada de su estancia en España, aun cuando es pequeño en extensión (poco más de 10.000 Km.2, la mitad casi exacta de su estado natal de Massachusetts), es un país en el pleno sentido de la palabra: un territorio bien definido, un pueblo abierto asentado en él desde los umbrales de la historia, y un proyecto colectivo de sociedad plural orgullosamente asumido y defendido por la inmensa mayoría de los asturianos”.
Tras recordar estas palabras, el presidente del Principado apuntó que “por lo tanto algunos no nos hemos convertido ni ayer ni anteayer a ninguna idea nueva en relación con la defensa de los intereses de Asturias, sino que seguimos manteniendo el mismo compromiso de vocación y coherencia que yo les estoy agradeciendo a ustedes en la mañana de hoy”.
En referencia a los miembros del nuevo Consejo de Gobierno, Álvarez-Cascos quiso subrayar “la importancia de su compromiso de servicio porque creo en la vocación política como servicio, es decir, como vocación eventual y no creo en la vocación como oficio, es decir, en la vocación política como trabajo permanente y fijo. Desde esta perspectiva siempre me ha parecido la política como el más noble servicio al que puede dedicarse una persona en defensa de los intereses de su tierra, de su país, de su nación”.
Finalmente emplazó a los nuevos consejeros “a trabajar en equipo y a trabajar a tres turnos. En equipo porque todos nosotros respondemos solidariamente, porque todos integramos un órgano colegiado de acuerdo con las previsiones del artículo 33 de nuestro Estatuto de Autonomía. Somos un equipo y respondemos solidariamente en el colegio de las consejeras y consejeros del gobierno del Principado de Asturias. Y trabajar a tres turnos no es ninguna novedad, es una impronta con la que hemos querido trasladarle a la sociedad asturiana que el mejor discurso es siempre el del ejemplo y que se pueden ahorrar muchas palabras cuando es el ejemplo el que habla y yo les invito a que ese compromiso se proyecte en el máximo esfuerzo personal y en la máxima laboriosidad en desarrollo de las tareas que tienen encomendadas”.
El presidente también recordó que los consejeros tenían esa misma tarde “una responsabilidad institucional con la formalización del traspaso de poderes con el equipo que a partir de estos momentos ha cesado en sus responsabilidades y creo que es un momento que tiene que ir más allá de una mera deferencia y espero que el saludo de despedida y de bienvenida sea el símbolo de la continuidad en el relevo. Nosotros venimos a continuar el trabajo de los que nos han precedido”.