LAS GRADERÍAS ESTUVIERON ‘HASTA LA BANDERA’
La Fundación Centro Asturiano organizó una novillada en el CAC
La Fundación Centro Asturiano (FCA), que preside Fernando Gómez Alonso, realizó la tarde del sábado 24 de abril, una novillada llevada a cabo en la ‘Cancha de Bolos de Tineo’, del Centro Asturiano de Caracas (CAC).
La Fundación Centro Asturiano (FCA), que preside Fernando Gómez Alonso, realizó la tarde del sábado 24 de abril, una novillada llevada a cabo en la ‘Cancha de Bolos de Tineo’, del Centro Asturiano de Caracas (CAC).
Esta corrida consistió en cuatro novillos de la ganadería ‘La Islita’, ubicada en el estado Aragua, para aficionados prácticos, en la que actuaron el maestro Alfredo Movilla, acompañado del ganadero Euclides Sánchez, Antonio Martínez y Pedro Martín, faena que fue disfrutada por unas cuatrocientas personas, que a los sones de la ‘Banda de Música Taurina’ coreaban sus más profundos ‘olé’.
En el tradicional despeje de la plaza, actuaron Andrea Romano con su corcel ‘Chispas’, estando los diestros acompañados en el paseíllo por Zoila Bastidas y los niños Sebastián, nieto del maestro Movilla, y José Guillermo Redondo, quienes ataviados de toreros, arrancaron los aplausos del los presentes, gradería que estaba ‘hasta la bandera’, como se denomina al lleno en términos taurinos. La corrida se lidió a la usanza portuguesa, lo que significa que no hubo derramamiento de sangre del toro, en esta caso de los novillos, en la plaza.
Previamente a la corrida, se realizó una misa rociera sobre la 1:00 de la tarde, que fue oficiada por el párroco de Las Minas de Baruta, Enrique Alaña Morillo, que estuvo acompañada de las voces del grupo flamenco ‘Los Payos Gitanos’, procediéndose luego al bautizo del libro ‘Manolete al Desnudo’ –impreso en los talleres de Publicaciones Monfort–, del reconocido periodista taurino, poeta y escritor Ángel Luis Omaña –ex colaborador de ‘Magazine Español’ con su columna taurina–, quien estuvo arropado por familiares y amigos; cerrando la jornada, en horas de la noche, con un show flamenco, y una ‘choripanada’.
Hubo también ese día una exposición de autos realizado por el ‘Mustang Club de Venezuela’ celebrando el 46º aniversario del lanzamiento del Ford Mustang, donde el público pudo apreciar autos de diferentes épocas.
También los asistentes pudieron disfrutar de una paellada para trescientas personas, preparada por el experto arrocero, chef Florencio Villar, que fue asistido por Reinaldo Romano Sordo, del Restaurante ‘La Huerta’.
El evento se realizó para recaudar fondos a favor de la Fundación Centro Asturiano, institución que funciona dentro de las instalaciones del CAC, pero que cuenta con personalidad jurídica propia.
Esta Fundación fue creada en 1993, por iniciativa de varios ex presidentes del Centro Asturiano de Caracas, no solamente para atender a socios del CAC en situación adversa, sino para socorrer a los asturianos más necesitados. La Fundación, según palabras de su presidente, recibe fondos del Gobierno de Asturias, y del Gobierno central de España, para la atención de asturianos en situación desfavorable en cualquier rincón de Venezuela, así como a los usuarios del Centro de Día que funciona en la entidad.
Los directivos de la Fundación hacen un llamado a todos los empresarios para que observen cuál en la misión y la función de la Fundación, ya que existen a lo largo y ancho de Venezuela muchos paisanos necesitados.
Junta Directiva de la Fundación Centro Asturiano, período 2008-2010: Fernando Gómez, presidente; Javier Nicolás Azpeitía, vicepresidente; Robinson Suárez Romano, secretario general; Manuel Otero Vila, tesorero. Directores: Elías Quintana, Claudio Pérez y Víctor Redondo.
Tauromaquia
La tauromaquia (del idioma griego ταῦρος, toro, y μάχομαι, luchar) se refiere a todo lo relativo a la práctica de lidiar toros, tanto a pie como a caballo, y se remonta a la Edad de Bronce. Su expresión más moderna y elaborada es la corrida de toros, un espectáculo que nació en España en el siglo XII y que se practica también en Portugal, sur de Francia y en diversos países de Hispanoamérica, como México, Colombia, Perú, Venezuela, Ecuador, Panamá y Bolivia. Es también espectáculo de exhibición en China, Filipinas, Estados Unidos y Cuba. Las corridas de toros han despertado vivas polémicas desde sus mismos comienzos entre partidarios y detractores.
En sentido amplio, la tauromaquia incluye además todo el desarrollo previo al espectáculo como tal, desde la cría del toro a la confección de la vestimenta de los participantes, además del diseño y publicación de carteles y otras manifestaciones artísticas o de carácter publicitario, que varían de acuerdo a los países y regiones donde la tauromaquia es parte de la cultura nacional.
Las corridas de toros son una importante actividad económica, que es una fuente de empleos y genera cuantiosos ingresos, principalmente por venta de entradas y derechos de televisión. Los festejos populares que organizan los ayuntamientos, coincidiendo con sus fiestas patronales (o con cualquier otra celebración), generan también un movimiento económico muy importante y moviliza una gran infraestructura (ganaderías, transportes, seguros, médicos y ambulancias, bandas de música, fuegos artificiales, cartelería...): se estima que en los pueblos de España se celebran unas 20.000 celebraciones taurinas al año, y se lidian unas 100.000 reses, lo que supone un gasto de unos 140 millones de euros anuales para que los toros corran por sus calles.
Esta corrida consistió en cuatro novillos de la ganadería ‘La Islita’, ubicada en el estado Aragua, para aficionados prácticos, en la que actuaron el maestro Alfredo Movilla, acompañado del ganadero Euclides Sánchez, Antonio Martínez y Pedro Martín, faena que fue disfrutada por unas cuatrocientas personas, que a los sones de la ‘Banda de Música Taurina’ coreaban sus más profundos ‘olé’.
En el tradicional despeje de la plaza, actuaron Andrea Romano con su corcel ‘Chispas’, estando los diestros acompañados en el paseíllo por Zoila Bastidas y los niños Sebastián, nieto del maestro Movilla, y José Guillermo Redondo, quienes ataviados de toreros, arrancaron los aplausos del los presentes, gradería que estaba ‘hasta la bandera’, como se denomina al lleno en términos taurinos. La corrida se lidió a la usanza portuguesa, lo que significa que no hubo derramamiento de sangre del toro, en esta caso de los novillos, en la plaza.
Previamente a la corrida, se realizó una misa rociera sobre la 1:00 de la tarde, que fue oficiada por el párroco de Las Minas de Baruta, Enrique Alaña Morillo, que estuvo acompañada de las voces del grupo flamenco ‘Los Payos Gitanos’, procediéndose luego al bautizo del libro ‘Manolete al Desnudo’ –impreso en los talleres de Publicaciones Monfort–, del reconocido periodista taurino, poeta y escritor Ángel Luis Omaña –ex colaborador de ‘Magazine Español’ con su columna taurina–, quien estuvo arropado por familiares y amigos; cerrando la jornada, en horas de la noche, con un show flamenco, y una ‘choripanada’.
Hubo también ese día una exposición de autos realizado por el ‘Mustang Club de Venezuela’ celebrando el 46º aniversario del lanzamiento del Ford Mustang, donde el público pudo apreciar autos de diferentes épocas.
También los asistentes pudieron disfrutar de una paellada para trescientas personas, preparada por el experto arrocero, chef Florencio Villar, que fue asistido por Reinaldo Romano Sordo, del Restaurante ‘La Huerta’.
El evento se realizó para recaudar fondos a favor de la Fundación Centro Asturiano, institución que funciona dentro de las instalaciones del CAC, pero que cuenta con personalidad jurídica propia.
Esta Fundación fue creada en 1993, por iniciativa de varios ex presidentes del Centro Asturiano de Caracas, no solamente para atender a socios del CAC en situación adversa, sino para socorrer a los asturianos más necesitados. La Fundación, según palabras de su presidente, recibe fondos del Gobierno de Asturias, y del Gobierno central de España, para la atención de asturianos en situación desfavorable en cualquier rincón de Venezuela, así como a los usuarios del Centro de Día que funciona en la entidad.
Los directivos de la Fundación hacen un llamado a todos los empresarios para que observen cuál en la misión y la función de la Fundación, ya que existen a lo largo y ancho de Venezuela muchos paisanos necesitados.
Junta Directiva de la Fundación Centro Asturiano, período 2008-2010: Fernando Gómez, presidente; Javier Nicolás Azpeitía, vicepresidente; Robinson Suárez Romano, secretario general; Manuel Otero Vila, tesorero. Directores: Elías Quintana, Claudio Pérez y Víctor Redondo.
Tauromaquia
La tauromaquia (del idioma griego ταῦρος, toro, y μάχομαι, luchar) se refiere a todo lo relativo a la práctica de lidiar toros, tanto a pie como a caballo, y se remonta a la Edad de Bronce. Su expresión más moderna y elaborada es la corrida de toros, un espectáculo que nació en España en el siglo XII y que se practica también en Portugal, sur de Francia y en diversos países de Hispanoamérica, como México, Colombia, Perú, Venezuela, Ecuador, Panamá y Bolivia. Es también espectáculo de exhibición en China, Filipinas, Estados Unidos y Cuba. Las corridas de toros han despertado vivas polémicas desde sus mismos comienzos entre partidarios y detractores.
En sentido amplio, la tauromaquia incluye además todo el desarrollo previo al espectáculo como tal, desde la cría del toro a la confección de la vestimenta de los participantes, además del diseño y publicación de carteles y otras manifestaciones artísticas o de carácter publicitario, que varían de acuerdo a los países y regiones donde la tauromaquia es parte de la cultura nacional.
Las corridas de toros son una importante actividad económica, que es una fuente de empleos y genera cuantiosos ingresos, principalmente por venta de entradas y derechos de televisión. Los festejos populares que organizan los ayuntamientos, coincidiendo con sus fiestas patronales (o con cualquier otra celebración), generan también un movimiento económico muy importante y moviliza una gran infraestructura (ganaderías, transportes, seguros, médicos y ambulancias, bandas de música, fuegos artificiales, cartelería...): se estima que en los pueblos de España se celebran unas 20.000 celebraciones taurinas al año, y se lidian unas 100.000 reses, lo que supone un gasto de unos 140 millones de euros anuales para que los toros corran por sus calles.
