EL PREGÓN LO REALIZÓ EL CONSEJERO DE MEDIO AMBIENTE DEL GOBIERNO DE CANTABRIA, DE ORIGEN ASTUR
El Centro Asturiano de Santander homenajeó un año más a ‘La Santina’
En la función de los Centros Asturianos enclavados en todo el mundo por distintas ciudades, para la acogida y cobijo social de la emigración del Principado y su integración en la vida urbana de los pueblos, la del de Santander destaca no sólo por el prestigio vecinal y urbano adquiridos, sino por el impulso de superación de actividades que de año en año registra en progresión, enriqueciendo con ello una ciudad de tanto relieve cultural y turístico, como la capital de Cantabria, así como en el mantenimiento de una convivencia que nació al mismo tiempo en la historia con las gentes de los dos lados del Deva.
En la función de los Centros Asturianos enclavados en todo el mundo por distintas ciudades, para la acogida y cobijo social de la emigración del Principado y su integración en la vida urbana de los pueblos, la del de Santander destaca no sólo por el prestigio vecinal y urbano adquiridos, sino por el impulso de superación de actividades que de año en año registra en progresión, enriqueciendo con ello una ciudad de tanto relieve cultural y turístico, como la capital de Cantabria, así como en el mantenimiento de una convivencia que nació al mismo tiempo en la historia con las gentes de los dos lados del Deva.
En el Santander evolucionado del XIX y expandido hacia el suroeste de la Vieja Puebla de San Emeterio, surge en la ladera noroeste del riachuelo que corría desde Cuatrocaminos a Las Atarazanas el núcleo de Peñas Redondas, donde se aglomeraba el personal recién llegado, atraído por la actividad portuaria, entonces en auge, que intercambiaba tráfico y mercaderías entre la Montaña de Castilla al Mar y Liverpool, Plymouth, Nantes y Cuba.
Ahí se enclava actualmente el Centro Asturiano de Santander: Peñas Redondas.
Su actual presidente, Felipe Somohano, de ancestros peñamelleranos, viene desarrollando una entusiasta y eficaz actividad, que se refleja, no sólo en el clima de la sociedad asturiana dentro de los salones de la Institución, sino en la simpatía creciente de toda la vecindad de la ciudad.
Con motivo anual de las fiestas de la Virgen de Covadonga, ‘La Santina’, y del Día de Asturias, este año se celebró un triduo por todo lo alto, dedicado a la ‘folixa’ de saya, dengue y montera.
La fiesta comenzó el viernes 9 con el ‘Pregón de las Fiestas’, a cargo de Javier Fernández González, consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Gobierno de Cantabria, que felicitaba a los asistentes de tener la ocasión de saludar a tierra tan noble y hermana, de cuyo origen había reconquistado los valores de nuestra cultura con el pueblo cántabro. Todo el público, encabezado por los concejales Gemma Díaz y Santiago Recio, que habían sido acogidos por el anfitrión, Felipe Somohano, aplaudieron tal proclama y al son de la gaita de Diego, comenzaron los festejos.
El sábado 10, en los salones del Centro llenos de público, se compartió mesa en una Cena de Hermandad, llena de felicitaciones y buen menú, al término de la cual se hizo entrega de placas a la Organización Internacional del Río Sella, en su septuagésimo quinto aniversario.
Asimismo se entregaron placas de honor a los representantes de Los Bandos Llaniscos, La Magdalena, San Roque y Santísima Virgen de La Guía.
Lucía el escenario, presidido por la imagen de ‘La Santina’, banderas de Cantabria y Asturias, así como una canoa y remos, símbolos de tan prestigiosa competición riosellana y por parte de Los Bandos de Llanes, un magnífico y aromático Ramo de Roscos, dispuesto para la procesión del día siguiente.
Tomó la palabra el cronista oficial de Ribadesella, Lorenzo Cordero, cuyo prestigioso y atinado análisis dejó sobre el atril clarificado el proceso histórico desde Dionisio de La Huerta hasta el presente, así como relaciones de curiosas coincidencias sociales con el batir de los remos festivos de los remeros y del tren fluvial ornado de guirnaldas.
A continuación, y en representación de Manuel Maya Conde, cronista oficial de Llanes, cuyo prestigio y autoridad en el tema, debido a compromisos ineludibles, lamentó, tomó la palabra Cecilio F. Testón, cronista de las Peñamelleras, quien dio noticia de por qué se premiaba a Los Bandos de Llanes, cuyos representantes estaban en el acto, luciendo en las solapas el clavel (La Magdalena), la siempreviva (San Roque) y el nardo (La Virgen de La Guía).
En la misma noche y no precisamente como cuestión aparte, sino como una de las actividades más entrañables de los dos pueblos, precisamente en sus fiestas, la Asociación Pico de Peñamellera de tanto prestigio en el juego de los bolos de las dos Autonomías, con presencia de su presidente, Isidro Caballero Sardina, aprovechó para hacerle entrega a Margarita Serrano, viuda del inolvidable Marcelino Ortiz Tercilla, el dibujo original, que el cronista Cecilio F. Testón hizo del mismo con motivo de una publicación. Compuso Isidro la justa apología del gran periodista desaparecido, que dedicó su pluma y afanes a mantener este juego tradicional, tan arraigado en la cultura popular.
La gaita con el himno de Asturias puso en pie a los asistentes, al concluir los actos.
A la mañana siguiente, domingo 11, desde el Centro Asturiano hasta Las Reparadoras, ‘La Santina’, escoltada por la Asociación de Veteranos de La Armada, por la Asociación del Traje Regional de Cantabria, por el Coro Ronda Altamira, por la Banda de Gaitas El Llacín y por el Grupo Principado, siguiéndoles el ramo de roscos de ofrenda y multitud entusiasmada, asistió a la Santa Misa.
En la tarde noche la romería aguantó las estrellas a bombo y platillo del Grupo Principado y de Amigos del Swin de Bilbao hasta la chocolatada de los valientes.
En el Santander evolucionado del XIX y expandido hacia el suroeste de la Vieja Puebla de San Emeterio, surge en la ladera noroeste del riachuelo que corría desde Cuatrocaminos a Las Atarazanas el núcleo de Peñas Redondas, donde se aglomeraba el personal recién llegado, atraído por la actividad portuaria, entonces en auge, que intercambiaba tráfico y mercaderías entre la Montaña de Castilla al Mar y Liverpool, Plymouth, Nantes y Cuba.
Ahí se enclava actualmente el Centro Asturiano de Santander: Peñas Redondas.
Su actual presidente, Felipe Somohano, de ancestros peñamelleranos, viene desarrollando una entusiasta y eficaz actividad, que se refleja, no sólo en el clima de la sociedad asturiana dentro de los salones de la Institución, sino en la simpatía creciente de toda la vecindad de la ciudad.
Con motivo anual de las fiestas de la Virgen de Covadonga, ‘La Santina’, y del Día de Asturias, este año se celebró un triduo por todo lo alto, dedicado a la ‘folixa’ de saya, dengue y montera.
La fiesta comenzó el viernes 9 con el ‘Pregón de las Fiestas’, a cargo de Javier Fernández González, consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio del Gobierno de Cantabria, que felicitaba a los asistentes de tener la ocasión de saludar a tierra tan noble y hermana, de cuyo origen había reconquistado los valores de nuestra cultura con el pueblo cántabro. Todo el público, encabezado por los concejales Gemma Díaz y Santiago Recio, que habían sido acogidos por el anfitrión, Felipe Somohano, aplaudieron tal proclama y al son de la gaita de Diego, comenzaron los festejos.
El sábado 10, en los salones del Centro llenos de público, se compartió mesa en una Cena de Hermandad, llena de felicitaciones y buen menú, al término de la cual se hizo entrega de placas a la Organización Internacional del Río Sella, en su septuagésimo quinto aniversario.
Asimismo se entregaron placas de honor a los representantes de Los Bandos Llaniscos, La Magdalena, San Roque y Santísima Virgen de La Guía.
Lucía el escenario, presidido por la imagen de ‘La Santina’, banderas de Cantabria y Asturias, así como una canoa y remos, símbolos de tan prestigiosa competición riosellana y por parte de Los Bandos de Llanes, un magnífico y aromático Ramo de Roscos, dispuesto para la procesión del día siguiente.
Tomó la palabra el cronista oficial de Ribadesella, Lorenzo Cordero, cuyo prestigioso y atinado análisis dejó sobre el atril clarificado el proceso histórico desde Dionisio de La Huerta hasta el presente, así como relaciones de curiosas coincidencias sociales con el batir de los remos festivos de los remeros y del tren fluvial ornado de guirnaldas.
A continuación, y en representación de Manuel Maya Conde, cronista oficial de Llanes, cuyo prestigio y autoridad en el tema, debido a compromisos ineludibles, lamentó, tomó la palabra Cecilio F. Testón, cronista de las Peñamelleras, quien dio noticia de por qué se premiaba a Los Bandos de Llanes, cuyos representantes estaban en el acto, luciendo en las solapas el clavel (La Magdalena), la siempreviva (San Roque) y el nardo (La Virgen de La Guía).
En la misma noche y no precisamente como cuestión aparte, sino como una de las actividades más entrañables de los dos pueblos, precisamente en sus fiestas, la Asociación Pico de Peñamellera de tanto prestigio en el juego de los bolos de las dos Autonomías, con presencia de su presidente, Isidro Caballero Sardina, aprovechó para hacerle entrega a Margarita Serrano, viuda del inolvidable Marcelino Ortiz Tercilla, el dibujo original, que el cronista Cecilio F. Testón hizo del mismo con motivo de una publicación. Compuso Isidro la justa apología del gran periodista desaparecido, que dedicó su pluma y afanes a mantener este juego tradicional, tan arraigado en la cultura popular.
La gaita con el himno de Asturias puso en pie a los asistentes, al concluir los actos.
A la mañana siguiente, domingo 11, desde el Centro Asturiano hasta Las Reparadoras, ‘La Santina’, escoltada por la Asociación de Veteranos de La Armada, por la Asociación del Traje Regional de Cantabria, por el Coro Ronda Altamira, por la Banda de Gaitas El Llacín y por el Grupo Principado, siguiéndoles el ramo de roscos de ofrenda y multitud entusiasmada, asistió a la Santa Misa.
En la tarde noche la romería aguantó las estrellas a bombo y platillo del Grupo Principado y de Amigos del Swin de Bilbao hasta la chocolatada de los valientes.
