Aseguran que la política exterior de la Xunta se limita a viajar al Golfo de México y a paraísos tropicales

Los socialistas acusan al Gobierno gallego de dejar “abandonados” a los emigrantes gallegos

La portavoz de Emigración del Grupo Socialista, Marisol Soneira, criticó que el Gobierno gallego, con Feijóo a la cabeza, limite la política exterior a “viajar al Golfo de México y a paraísos tropicales” mientras “nuestros emigrantes quedan abandonados” a su suerte. Soneira también reclamó la comparecencia de Feijóo y del responsable de Emigración del gobierno para dar cuenta del “fiasco” de su gestión.

Los socialistas acusan al Gobierno gallego de dejar “abandonados” a los emigrantes gallegos
Marisol Soneira
Marisol Soneira, durante la rueda de prensa.

La portavoz de Emigración del Grupo Socialista, Marisol Soneira, criticó que el Gobierno gallego, con Feijóo a la cabeza, limite la política exterior a “viajar al Golfo de México y a paraísos tropicales” mientras “nuestros emigrantes quedan abandonados” a su suerte. Soneira también reclamó la comparecencia de Feijóo y del responsable de Emigración del gobierno para dar cuenta del “fiasco” de su gestión.

La responsable de Emigración de los socialistas gallegos denunció que el Gobierno gallego haya situado “en la irrelevancia” los presupuestos de la emigración, reducidos en un 61 por ciento desde 2009, y el presidente de la Xunta y los miembros del Gobierno gallego utilizan los encuentros con los emigrantes “como relleno de agendas inexistentes y carentes de objetivos, con actos anacrónicos con olor a naftalina”.

Soneira criticó así que la agenda exterior del Gobierno gallego se limite la “estupendos viajes periódicos de quince días a Brasil” de la conselleira de Traballo e Benestar y del vicepresidente de la Xunta en temporada alta “disfrazados de visitas institucionales”.

La responsable socialista presentó una batería de iniciativas parlamentarias sobre la falta de política de emigración “en un país donde el 20 por ciento de su población vive fuera”. Dijo que la reforma de la Loreg, con la implantación del voto rogado, “provocó que el voto emigrante sea irrelevante, y por lo tanto dejó de tener interés para la Xunta y para un PP para el cual si no votas no existes”.

Soneira señaló que ya que el voto emigrante se redujo a apenas un 3 por ciento en las últimas elecciones europeas, Feijóo pasó de prometer la tarjeta del Sergas a todo gallego emigrado la “tratarlos como inmigrantes y negarles el derecho a la sanidad pública”. Esta es la realidad, explicó, de un Gobierno gallego sin proyecto, estrategia ni políticas que vinculen a los descendientes de la emigración en un proyecto común con Galicia.

Acusó a Feijóo de “despreciar el potencial económico y social de la emigración gallega” con un objetivo común en defensa de los intereses de Galicia. Puso como ejemplo “el intento de Feijóo de conseguir inversiones para NGB en la emigración de México”, que finalizaron con la venta de la entidad a un agente de Venezuela en una iniciativa absolutamente ajena al Gobierno gallego.

La socialistas Soneira criticó que gestione las relaciones internacionales del gobierno gallego dirigido por el “sectarismo según el color político de quien gobierne”, y recordó así el desprecio a Venezuela, y su empeño en reunirse tan sólo con la oposición argentina, obviando el gobierno que “es quien finalmente toma las decisiones”, mientras se limitan a acudir a México, su “amigo para todo”.

Emigrantes retornados

La responsable socialista denunció que la emigración “no existe para el gobierno gallego salvo para discriminarlos y perseguirlos como si fuesen  delincuentes fiscales”. Así lo dijo después del anuncio del gobierno de que devolverá las multas y recargos a los retornados a lo largo de 2015, mientras renuncia a regularizar legalmente su situación.

Soneira señala que la decisión del ejecutivo constituye una “medida electoralista que no responde al problema de fondo” del deber a declarar a los que reciben rentas de dos pagadores aunque su renta total sea inferior al mínimo obligatorio para declarar.

Esta respuesta resulta “discriminatoria para los emigrantes retornados”, que tienen que regularizar el cien por cien las pensiones de los últimos cinco años, lo que “ni de lejos se acerca a la amnistía fiscal diseñada a la medida de los grandes defraudadores fiscales, ladrones y criminales, algunos de ellos vinculados al PP y a su financiación”.