De las pruebas del PP a la denuncia de Marisol Soneira
El caso de la supuesta agente electoral se destapó el pasado mes de febrero cuando el PPdeG denunció que la Xunta había utilizado fondos públicos para pagar un billete de avión a Argentina a María Isabel Blanco Rodríguez, una afiliada socialista que reconoció haber trabajado como agente electoral del PSdeG para las pasadas municipales. El PP presentó pruebas sobre el caso y pidió la dimisión de los principales implicados: la responsable de Emigración del PSdeG, Marisol Soneira; el secretario xeral de Emigración, Manuel Luis Rodríguez; y el conselleiro de Traballo, Ricardo Varela.
El secretario xeral del PPdeG, Alfonso Rueda, mostró un correo de Soneira a Blanco en el que le detallaba localizador y datos del vuelo que la llevaría, el 2 de abril de 2007, de Santiago de Compostela a Madrid y de la capital española a Buenos Aires, y del viaje de vuelta a la capital gallega el 23 de mayo. El correo era un reenvío de la Secretaría Xeral de Emigración a la responsable de Emigración del PSdeG, en el que se puede leer que el billete se gestionó por orden del responsable de este departamento, Manuel Luis Rodríguez, a través de su jefe de Gabinete, Carlos Cortón.
Blanco, retornada de Argentina, admitió que trabajó como agente electoral de Félix Porto –actual alcalde socialista en Muxía– durante la campaña para las municipales, y como prueba, Rueda mostró varios ‘emails’ remitidos por emigrantes gallegas quienes aseguran haberla recibido en sus casas de Buenos Aires y haberles proporcionado informacion electoral del PSOE, junto a un CD y una carta.
Soneira aclaró que la mujer retornó a Galicia con su madre, su marido y un hijo pequeño en los peores momentos de la crisis de Argentina, y “pasó muchas dificultades”. “Mi relación con ella es ayudarle ante su situación de extrema necesidad”, dijo Soneira, quien reconoció que pudo haber “pecado de incauta” al pagarle un viaje para que fuera a ver a su hermana, que reside en el país austral y que se encuentra enferma. Tras las declaraciones de Soneira, los ‘populares’ desvelaron que en el periodo en que la Xunta pagó el vuelo a Blanco, ésta tenía un contrato en vigor con ingresos de 984,78 euros al mes. Para reforzar esta prueba, presentó el contrato que demuestra que trabajó para Unións Agrarias, sindicato del que era máximo responsable de la Costa da Morte Félix Porto. El PP también denunció que se le pagaba esa cantidad con cargo a una subvención que concedía la Consellería de Traballo.
Soneira demandó a Blanco por sus declaraciones y el presidente de la Xunta mandó abrir una investigación interna que se cerró tras no hallar irregularidades en la concesión del billete.
El secretario xeral del PPdeG, Alfonso Rueda, mostró un correo de Soneira a Blanco en el que le detallaba localizador y datos del vuelo que la llevaría, el 2 de abril de 2007, de Santiago de Compostela a Madrid y de la capital española a Buenos Aires, y del viaje de vuelta a la capital gallega el 23 de mayo. El correo era un reenvío de la Secretaría Xeral de Emigración a la responsable de Emigración del PSdeG, en el que se puede leer que el billete se gestionó por orden del responsable de este departamento, Manuel Luis Rodríguez, a través de su jefe de Gabinete, Carlos Cortón.
Blanco, retornada de Argentina, admitió que trabajó como agente electoral de Félix Porto –actual alcalde socialista en Muxía– durante la campaña para las municipales, y como prueba, Rueda mostró varios ‘emails’ remitidos por emigrantes gallegas quienes aseguran haberla recibido en sus casas de Buenos Aires y haberles proporcionado informacion electoral del PSOE, junto a un CD y una carta.
Soneira aclaró que la mujer retornó a Galicia con su madre, su marido y un hijo pequeño en los peores momentos de la crisis de Argentina, y “pasó muchas dificultades”. “Mi relación con ella es ayudarle ante su situación de extrema necesidad”, dijo Soneira, quien reconoció que pudo haber “pecado de incauta” al pagarle un viaje para que fuera a ver a su hermana, que reside en el país austral y que se encuentra enferma. Tras las declaraciones de Soneira, los ‘populares’ desvelaron que en el periodo en que la Xunta pagó el vuelo a Blanco, ésta tenía un contrato en vigor con ingresos de 984,78 euros al mes. Para reforzar esta prueba, presentó el contrato que demuestra que trabajó para Unións Agrarias, sindicato del que era máximo responsable de la Costa da Morte Félix Porto. El PP también denunció que se le pagaba esa cantidad con cargo a una subvención que concedía la Consellería de Traballo.
Soneira demandó a Blanco por sus declaraciones y el presidente de la Xunta mandó abrir una investigación interna que se cerró tras no hallar irregularidades en la concesión del billete.