Miranda reivindicó tener voz propia en el Pleno porque "tenemos competencias respecto de los ciudadanos en el exterior"
“Reivindicamos que debemos tener nuestra parte dentro del Pleno como lo tiene el Estado”, aseguró el secretario xeral de Emigración, Antonio Rodríguez Miranda, durante la celebración del Pleno del Consejo General de la Ciudadanía Española en el Exterior (CGCEE), cuyo orden del día no recogía un espacio propio para la intervención de las comunidades autónomas, tal y como tradicionalmente se hacía.

El responsable de Emigración de Galicia explicó que “las comunidades autónomas y Galicia, particularmente, se siente limitada en cuanto a la capacidad de actuar en este Pleno” y resaltó que al ser administración deberían de poder intervenir “de la misma manera que lo hacen los órganos de la propia administración del Estado”, dijo en referencia a las intervenciones en el Pleno de la secretaria de Estado, la directora general y el subsecretario de Exteriores.
“Las comunidades autónomas –insistió– somos Estado y como somos Estado también ejercemos competencias respecto de los ciudadanos en el exterior, tanto es así que en la actualidad, en muchos casos, las comunidades autónomas desarrollamos una serie de competencias que hasta podríamos denominar impropias” porque deberían estar ejecutadas por el Gobierno central pero “nosotros lo hacemos por compromiso porque entendemos que debemos actuar así respecto de nuestros ciudadanos”.
Miranda recordó que representa a Galicia, una comunidad que “tiene una implicación intensa y muy directa con los ciudadanos del exterior” y se mostró “muy orgulloso de estar buena parte del tiempo de todo un año, no en España ni en Galicia, sino en muchos países del mundo en donde están los gallegos porque entendemos que es la mejor forma de conocer lo que ocurre, de saber las necesidades, las inquietudes y de poder ajustar nuestras políticas”.
Miranda dejó claro que no quería el lugar de los representantes de la colectividad en el exterior sino “un espacio que es de justicia en base a las competencias que la normativa, la legislación y el compromiso nos lleva a ejecutar, más allá de la propia normativa”.
Nacionalidad
Además de esta reivindicación para contar con un tiempo propio en el Pleno, Rodríguez Miranda analizó algunas de las cuestiones de actualidad que afectan a los españoles en el exterior como es el tema de la nacionalidad.
En este ámbito, mostró “una gran preocupación” y reivindicó “la necesidad inexcusable de que de una vez por todas haya una ley permanente y estable”.
Miranda reconoció que se cometió un error haciendo una primera ley temporal y que ahora se repitió el mismo error y con una “ejecución mucho peor que la anterior”, ya que “tenemos a nuestros órganos del exterior absolutamente colapsados por imprevisión y además estamos afectando al resto de los ciudadanos porque esos órganos del exterior no le pueden dar la atención adecuada por ese colapso que están sufriendo”.
En referencia a esta saturación, Miranda destacó que todos debemos colaborar y recordó que Galicia lo ha hecho firmando “un acuerdo con todas las diócesis” para que todos los ciudadanos puedan acceder a sus antecedentes familiares y cifró en 20.000 los ciudadanos que el año pasado han podido acceder a esos antecedentes familiares. “Esta es nuestra forma de colaborar para aliviar esa ansiedad que yo puedo entender que tengan tantos ciudadanos españoles que están pendientes de su nacionalidad”, recalcó Miranda.
Voto exterior
El secretario xeral de Emigración también hizo referencia a la reforma de la Loreg que permitió la supresión del voto exterior una reforma que calificó de “fundamental” pero en lo que todavía queda mucho por avanzar, “sobre todo en materia de trasladar a los ciudadanos del exterior que tenemos una norma cambiada”. “Hay mucha gente –recalcó– que todavía no lo sabe, todas las administraciones tenemos que implicarnos y por su puesto todos los Consejos de Residentes. Sé que lo hacen y yo les animo porque es muy importante llegar a la ciudadanía”.
En este ámbito, Rodríguez Miranda insistió en que el Estado debe seguir avanzando en cuanto a los lugares habilitados para depositar el voto en urna y aclaró que no es lo mismo Europa que América, donde “hay países que son un auténtico continente y por lo tanto hay que ampliar los lugares de depósito de voto” y citó el caso de Venezuela donde se pudo votar en el consulado honorario de Valencia, lo que supuso “un cambio sustancial en la participación porque ahí votar por correo no es posible”.
Además, explicó que también sería deseable ampliar los lugares de votación en Argentina, concretamente en Mar del Plata o “mantener el paso que se ha dado en Brasil en el caso del viceconsulado de Santos, pero dentro de Brasil habría otros lugares a los que se podría extender y así podíamos seguir”.
Otro de los puntos en los que el Estado debe seguir avanzando es en “la revisión y depuración de los censos del exterior que todavía contienen muchísimas irregularidades e indudablemente es el servicio exterior y el Estado quien tiene que tratar de corregirlas”.
Ayudas sociales
Miranda también reprochó al Gobierno no estar cerca de los ciudadanos del exterior y no tener en cuenta sus necesidades en materia social. “Determinados programas –matizó– pueden ser fruto de la voluntad política pero hay otros que no, que son recogidos y establecidos en las leyes” y citó como ejemplo las personas que están en Venezuela esperando su prestación por razón de necesidad, ya que hay muchos españoles “que no la reciben después de haberla solicitado hace muchísimos meses, parece ser que las excusas son de índole presupuestario y no puede haber excusas de índole presupuestario en aquellos derechos que están recogidos en las leyes”.
“A este tema hay que buscarle solución porque hay solución, hay recursos públicos y hay prioridades”, resaltó Miranda quien reconoció que “es verdad que la falta de presupuestos puede ser un problema, pero para aprobar un presupuesto hace falta que el Gobierno lo lleve al Parlamento y si eso no ocurre difícilmente se puede aprobar”.
Asimismo, el responsable de Emigración de Galicia también reivindicó la necesidad de cuidar a las entidades del exterior “porque son el núcleo asociativo, han sido durante muchísimos años el germen de mantener esa identidad española en el mundo” y, aunque ahora haya otras formas de relacionarse y de asociacionismo, “siguen siendo fundamentales en el ámbito cultural y también en el ámbito social, porque incluso en el ámbito social llega a sustituir a las administraciones españolas y por eso el Estado no se puede olvidar de ellas”.
Red consular
La situación de la red consular fue otro de los temas recurrentes a lo largo del Pleno y Miranda destacó la necesidad de “adaptarla a la realidad actual” y “no vale la distribución territorial de hace 50 años para la realidad de los españoles que tenemos hoy y los que vamos a tener en muy poquito tiempo”.
Además, explicó, hay que tener en cuenta a los nuevos españoles que “adquieren nacionalidad o a esos españoles que cada día están naciendo en los diferentes lugares del mundo y que sus familias al inscribirlas en el consulado le dan esa continuidad de nacionalidad. Ahí las administraciones públicas tienen que estar y ahí también notamos su ausencia por parte de la administración del Estado”.
Retorno
El responsable de Emigración de la Xunta cerró su intervención hablando del retorno y se mostró orgullo de “estar en una comunidad autónoma que lleva trabajando desde el año 2018 con gran intensidad en materia de retorno” porque, a pesar de que la salida de españoles al exterior es constante, los datos demográficos dicen que España es positiva en la recepción. “Cada año –dijo– el número de españoles emigrantes –es decir aquellos que han nacido y se han ido– cada día es más bajo. Es verdad que es al mismo tiempo que la ciudadanía en el exterior crece, pero crece por esos nuevos ciudadanos que están naciendo en cualquier lugar del mundo”.
El retorno, explicó, además de ser un derecho de los españoles recogido en la Constitución y en casi todos los estatutos de autonomía, es muy importante desde el punto de vista del reto demográfico, pero “para mí lo más valioso es la gran ventaja competitiva que da a nuestro tejido productivo incorporar a profesionales desde tantos lugares del mundo y que desde España puedan trabajar para el mundo porque, lo queramos o no, la economía está totalmente globalizada e incorporando a nuestros españoles en el retorno, no solo vuelven a casa sino que nos ayudan a ser punteros en el resto del mundo y para ello hay que resolver temas”.
En este ámbito también destacó que quedan muchas cosas por avanzar como las facilidades para conseguir un permiso de residencia para los conyugues que no son españoles o la homologación de títulos que lleva en muchos casos al infraempleo.
“Nosotros este año íbamos a poner en marcha un programa de becas de grado, pero lo hemos parado porque sabemos que en este momento se está cambiando la normativa para acceder a la Universidad Española para estudiar un grado desde el exterior y evidentemente no tendría sentido sacar una convocatoria de becas para personas que no van a saber a día de hoy como pueden acceder a la universidad en el próximo curso y sí hay soluciones”, aseguró el secretario xeral.