Elma Saiz analiza el funcionamiento de las ayudas individuales y a las familias con la consejera de Igualdad de Castilla y León
La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, recibió este miércoles 19 a la consejera de Familia e Igualdad de Oportunidades de la Junta de Castilla y León, María Isabel Blanco Llamas, para intercambiar impresiones sobre el funcionamiento del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y la Renta Garantizada de Ciudadanía (RGC).
Durante el encuentro, la ministra Saiz ha destacado el compromiso de colaboración del Gobierno de España con las comunidades autónomas para fortalecer los sistemas de protección a las personas en situación de pobreza y exclusión social. Además, volvió a hacer una llamada a la corresponsabilidad de las administraciones autonómicas “que pueden complementar la cuantía del IMV, aumentar su renta mínima o ampliar los colectivos a los que se dirige, garantizando un nivel de ingresos más digno y acorde a las necesidades reales de cada territorio”. “Lamentablemente muchas no lo están haciendo”, apostillan en el Ministerio.
Desde que se puso en marcha el IMV, en 2020, cerca de 37.000 familias de Castilla y León han recibido la prestación, beneficiando a un total de 110.000 personas, de las cuales el 43,6% son menores. El Gobierno central destinó 475 millones de euros al IMV en Castilla y León.
Por el contrario, la labor protectora de la Renta Garantizada de Ciudadanía de Castilla y León descendió un 80% en este tiempo: de 9.313 hogares beneficiados en 2020 pasó a 1.748. La nómina destinada a cubrir estas prestaciones pasó de 4,47 millones en mayo de 2020 a 816.914 euros en mayo de 2024. La cobertura de la RGC es del 7% en comparación con la del IMV.
Además, el Ministerio de Inclusión desarrolló siete itinerarios ligados al IMV en Castilla y León, con una inversión de 4,2 millones de euros y que han servido para beneficiar a 3.000 personas. La ministra informó a la consejera de la intención de ampliar el programa de itinerarios, a la vista de los grandes resultados obtenidos y animados por la Comisión Europea, que se abrió a estudiar nuevas vías de financiación para darle continuidad.
